
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, defendió este sábado 20 de setiembre la libertad y la soberanía de Venezuela, reivindicando la fortaleza y la unidad del pueblo venezolano ante las últimas amenazas vertidas por su homólogo estadounidense, Donald Trump, a quien el líder del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) dice no tener miedo.
“El pueblo venezolano le dice al imperio ¡Basta de amenazas! ¡Que viva la libertad del pueblo venezolano, que viva la patria libre y soberana!”, expresó el mandatario venezolano, que aseveró ―parafraseando una canción mexicana insignia de la lucha contra la dictadura en Honduras en la primera década del siglo XXI― que Estados Unidos “(les) tiene miedo porque no (tienen) miedo”, según recoge la emisora estatal VTV.
En esta misma línea, Maduro alardeó de que las “amenazas” del “imperio norteamericano”, lejos de infundir temor al pueblo venezolano, no han hecho sino dar lugar a una patria “más unida que nunca”. “Estamos más unidos que nunca para garantizar la soberanía, la paz y el derecho a la vida y el trabajo del pueblo de Venezuela”, insistió.
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El presidente latinoamericano reivindicó asimismo la naturaleza “guerrera, rebelde y libre” de los venezolanos y aseguró que están “arrechos y preparados” para afrontar cualquier dificultad.
“Si nos amenazan, más arrechos nos ponemos”, dijo el mandatario, haciendo además un llamado a sus socios de América Latina y El Caribe, a quienes garantizó que “el pueblo bolivariano está de pie, independiente, libre y soberano, y el imperio brutal no ha podido arrodillarlo ni lo hará”.
Las palabras de Maduro llegan después de que Donald Trump advirtiera este mismo sábado a Caracas de consecuencias “incalculables” si no acepta la devolución de los inmigrantes deportados, a los que ha calificado de “lo peor del mundo”.
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Este cruce de declaraciones pone de manifiesto la reciente escalada de tensiones entre ambos países, en un contexto en el que Venezuela acusa a Estados Unidos de desencadenar una “guerra no declarada” en el Caribe y exige una investigación de la ONU sobre los ataques contra lanchas presuntamente cargadas de droga por parte de las Fuerzas Armadas estadounidenses, que han dejado ya al menos 14 muertos en las últimas semanas.
Washington, por su parte, envió varios buques de guerra al Caribe, cerca de las costas de Venezuela, y desplegó cazas F-35 que se encuentran en Puerto Rico.
