El expresidente de Suráfrica recibió una ferviente ovación de los 15.000 delegados a la conferencia del sida en Barcelona, España, durante el acto de clausura. El tema predominante en la reunión fue la demanda de más fondos para tratar a millones de personas en los países en desarrollo.
Mientras científicos y activistas concluían la conferencia sobre el sida, el Senado de Estados Unidos aprobó ayer un proyecto de ley que asigna $4.500 millones en dos años para tratar y prevenir el sida, la tuberculosis y la malaria.
El proyecto, que crearía un plan estadounidense de lucha global contra el sida, debe ser conciliado con otra propuesta por $1.300 millones aprobada en diciembre por la Cámara Baja.
El sida es una guerra contra la humanidad, dijo Mandela. "Es una guerra que requiere de la movilización total de toda la población".
Durante dos décadas de epidemia, que cobra la vida de alguien cada 10 segundos, la brecha en tratamiento entre países ricos y pobres se ha acrecentado más que nunca.
El expresidente de Estados Unidos Bill Clinton, co-presidente, junto con Mandela, del Fondo Internacional para el Sida, dijo que ya era hora de que las naciones occidentales pagaran lo que debían al Fondo Mundial del Sida, que ha recibido menos de un tercio de los $10.000 millones anuales que se necesitan.
Los fármacos avanzados solo ayudan a personas con recursos.