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Bogotá (AFP). De ser cierto que el hijo del narcotraficante Pablo Escobar delinquió a su lado, como denuncia un exsicario del capo, lo hizo siendo menor de edad e influenciado por su padre, justificó el hoy el hijo de un exministro de Justicia asesinado hace dos décadas por Escobar.
La declaración del senador Rodrigo Lara, hijo del exministro de Justicia homónimo asesinado en en una calle de Bogotá en abril de 1984, se producen luego de que Jhon Jairo Velásquez (alias Popeye ), un exsicario preso, sostuvo que Juan Pablo Escobar, el hijo mayor del capo de la droga, habría participado en el crimen de un oficial de la policía en 1992.
Según este antiguo sicario, el hijo de Pablo Escobar recibió cinco millones de dólares que su padre arrebató a dos exsocios, antes de ordenar que los mataran.
Pero en declaraciones con la privada radio Caracol, Lara tomó distancia de la versión del exsicario desde prisión, y dijo que luego de sostener un reciente encuentro con el hijo del asesino de su padre –cuyo actual nombre es Sebastián Marroquín– “tiene la mejor impresión” de él.
“Si lo que dice Popeye llegara a ser verdad, hay que tener en cuenta que para entonces el hijo de Pablo Escobar era menor de edad, y demostraría que Escobar quiso llevar a sus hijos al mundo de violencia en el que vivió”, dijo.
“Marroquín es una persona de bien que logró hacerle frente a los conflictos, problemas y tentaciones de esa vida delincuencial a la que lo quería llevar su padre”, concluyó Lara.
Desde Argentina, donde reside junto a su madre y su hermana, Marroquín ha dicho que las denuncias del exsicario son falsas. “Son mentiras y afirmaciones amañadas a sus intereses personales”, aseveró.
Las declaraciones del sicario fueron reveladas una semana después de que Marroquín apareciera en diversos medios de prensa colombianos pidiendo perdón al país por los crímenes de su padre y promoviera una reunión con Lara y con los hijos del también asesinado candidato presidencial Luis Carlos Galán.
