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Bogotá. Reuters, AFP. El gobernador del departamento colombiano de Caquetá, Luis Francisco Cuéllar, fue encontrado muerto tras casi un día de secuestro a manos de presuntos rebeldes de las Fuerzas Amadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El cadáver del funcionario, rodeado con explosivos, fue hallado por el Ejército, informó este martes el Gobierno.
El crimen fue considerado como uno de los más graves cometidos por la guerrilla desde que el presidente Álvaro Uribe asumió el poder, en agosto del 2002.
La gobernadora encargada del departamento del Caquetá, Patricia Vega, dijo que recibió información del ministro de Defensa, Gabriel Silva, reportándole la muerte de Cuéllar.
“Tristemente tenemos que aceptar esta realidad tan dolorosa. Es un golpe muy fuerte a nuestra institucionalidad”, aseguró la funcionaria quien reveló que el cuerpo apareció cerca al lugar en donde los guerrilleros abandonaron e incendiaron el vehículo que usaron para escapar.
El cuerpo del político, de 69 años, con varios impactos de bala, fue hallado por las Fuerzas Armadas en un sector despoblado del selvático departamento, al sur del país, dentro de las operaciones ordenadas por Uribe para rescatarlo sano y salvo.
Uribe señaló el lunes a las FARC como responsables del secuestro del gobernador Cuéllar y ordenó a las fuerzas militares su rescate.
“He pedido a las Fuerzas Armadas que hagan todos los esfuerzos para rescatar al gobernador del Caquetá y a los otros secuestrados que quedan en poder de estos bandidos”, manifestó el mandatario.
El lunes, un grupo de hombres armados sacó a Cuéllar por la fuerza de su vivienda en Florencia, capital de Caquetá, tras atacarla con explosivos.
En el hecho, los atacantes mataron a un policía e hirieron a otros dos del grupo que custodiaba al gobernador.
El último secuestro de un mandatario regional ocurrió en el 2002 con el gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria, muerto en un fallido rescate en 2003.
