
Bogotá. AP. Tras algunos meses de silencio sobre un posible canje de secuestrados por rebeldes en prisión, las FARC ratificaron su interés en realizar ese intercambio, pero no mencionaron su vieja demanda sobre el retiro de la fuerza pública de una zona del país, según un comunicado rebelde divulgado ayer.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ofrecieron además una lista de 29 personas, entre políticos, militares y policías, que siguen en su poder, algunos desde hace una década.
“Mantenemos la propuesta de intercambio humanitario”, dijo el secretariado o dirección de las FARC en un comunicado divulgado en la página de Internet de la Agencia Bolivariana de Prensa (ABP), que suele difundir pronunciamientos de esa guerrilla.
“ Cualquier acercamiento o proceso que pretenda avanzar en la concreción del intercambio, o de acuerdos humanitarios que protejan a la población civil de la confrontación, debe contar con plenas y totales garantías y con la participación y presencia de países y gobiernos que brinden total confianza”, agregó el grupo insurgente en su nota, fechada desde las montañas de Colombia en agosto, pero sin un día preciso.
Las FARC no dijeron qué Gobierno ni países podrían servir en ese papel de garantes a un eventual intercambio.
Tampoco mencionaron su vieja demanda de que el Gobierno retire a militares y policías de los 180 kilómetros cuadrados de los municipios de Pradera y Florida, en el departamento de Valle del Cauca, y en el suroeste del país, una zona en la que han tenido un bastión.
El Gobierno sistemáticamente se ha negado a ese retiro. A fines del 2007 presentó como contrapropuesta hacer el intercambio en cualquier zona rural del país donde ya no exista presencia de la fuerza pública.
Desde el 1.° de marzo, cuando militares bombardearon un campamento rebelde matando a Raúl Reyes, uno de los siete miembros del secretariado y quien más pronunciamientos hacia sobre el tema del canje, las FARC solo habían mencionado el tema de forma tangencial.