Miami . El líder anticastrista Jorge Mas Canosa murió ayer, tras una prolongada enfermedad que obligó a su hospitalización hace varios meses, confirmaron fuentes de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA) a la radio y TV en español locales.
Las radios de Miami interrumpieron a mediados de la tarde su programación habitual para comunicar la muerte de Mas Canosa, uno de los más importantes dirigentes de los exiliados cubanos en Estados Unidos y presidente del grupo más influyente esa comunidad, la FNCA.
Mas Canosa obtuvo su mayor triunfo político en 1996, cuando consiguió que Estados Unidos promulgara la ley Helms-Burton, creada para endurecer el embargo contra Cuba y ahuyentar las inversiones extranjeras de la isla.
El líder anticastrista, que nació el 21 de setiembre de 1939 en Santiago de Cuba, falleció a las 13:20 locales (18:20 GMT), dijo un acongojado locutor en radio Mambí.
La radio dijo que la muerte se debió a complicaciones sufridas por Mas Canosa a raíz de un cáncer de la próstata, pero no fue posible, de inmediato, obtener confirmación del deceso en la FNCA.
El canal 51, afiliado local de la cadena Telemundo dijo luego que Mas Canosa, de 58 años, había fallecido en su residencia de Miami.
"La muerte de Jorge Mas Canosa deja un hondo vacío en nuestro exilio y en la lucha por la libertad de Cuba", declaró Armando Pérez Roura, director general de Radio Mambí.
El legislador republicano, Lincoln Díaz Balart, dijo que Mas Canosa fue "un apasionado defensor de la democracia" y aseguró que "lo atacaron constantemente por el daño que hizo a la tiranía de Fidel Castro, la pasión que puso por la libertad de Cuba, la democracia y las elecciones".
La también legisladora republicana Ileana Ross Lehtinen afirmó que una de las principales cualidades de Mas Canosa fue su habilidad para "manejarse y cabildear en Washington".
Como ejemplo, señaló que "no se habría conseguido la ley Helms-Burton sin él", además de una larga serie de medidas destinadas a presionar al régimen de Castro.
Tras exiliarse de Cuba en 1960, luego de confrontar a Fidel Castro, Mas Canosa se afincó en Estados Unidos y llegó a ser uno de los más destacados líderes anticastristas de la comunidad cubana en el exilio.