La expresidenta de los serbobosnios, Biljana Plavsic, se declaró ayer culpable de crímenes contra la humanidad, convirtiéndose en la primera responsable de alto rango en reconocer su culpabilidad en la guerra de Bosnia ante la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya para la antigua Yugoslavia.
A cambio de asumir su responsabilidad, la fiscal del CPI, Carla Del Ponte, aceptó retirar los demás cargos contra ella (una acusación de genocidio, otro crimen de guerra y cuatro crímenes contra la humanidad).
Pronunciando la palabra “culpable”, Biljana Plavsic, una de las principales dirigentes serbias de Bosnia durante la guerra, reconoció que participó en “persecuciones de musulmanes y croatas de Bosnia” en 37 ayuntamientos, de Banja Luka a Bijeljina.
Estas persecuciones incluían “medidas discriminatorias, matanzas durante y después de la ocupación de las localidades y aldeas, traslados forzosos, arrestos ilegales”, como por ejemplo en los campos de detención de Omarska y de Keraterm, en Prijedor (noroeste de Bosnia), precisa la acusación.
Reconoce abusos
Afirmando su culpabilidad, Plavsic reconoce que participó en los abusos cometidos “por las fuerzas serbobosnias y sus órganos políticos y gubernamentales”, como indica el documento.
Plavsic admitió su culpa en directo desde la República Federal Yugoslava (RFY) por videoconferencia.
“Es un hecho básico y muy importante para la antigua Yugoslavia. Por primera vez un líder de este rango admite los hechos y acepta expresar sus remordimientos a las víctimas”, estimó la portavoz de la oficina de la fiscal del CPI, Florence Hartmann.
Hasta ayer, solo seis acusados que desempeñaban cargos de poca responsabilidad han aceptado reconocer su culpabilidad ante la CPI.
En una declaración leída por uno de sus abogados, Plavsic señaló que “aceptando su responsabilidad y expresando sus remordimientos incondicionales” esperaba “ofrecer un cierto consuelo a las víctimas inocentes de la guerra de Bosnia-Herzegovina”.
Las partes no acordaron nada sobre la pena, que podría ser de cadena perpetua.