
Una investigación en curso que analizan el FBI y varias policías de California plantea que dos de los crímenes más enigmáticos de Estados Unidos tuvieron un mismo autor. El estudio relaciona el asesinato de Elizabeth Short, conocida como la Dalia Negra, con los ataques atribuidos al asesino del Zodíaco, ocurridos entre las décadas de 1940 y 1970.
El planteamiento surge de un expediente que revisan técnicos forenses y autoridades policiales estatales y federales. La hipótesis sostiene que ambos casos, considerados por décadas como misterios sin resolver, comparten un mismo responsable.
Entre 1968 y 1969, el asesino del Zodíaco sembró el terror en el norte de California. Al menos cinco personas murieron en ataques confirmados. A ese número se sumaron decenas de homicidios atribuidos por investigadores. El criminal también envió mensajes cifrados a medios de comunicación y a la policía, lo que aumentó su notoriedad pública.
Dos décadas antes, en 1947, Elizabeth Short, aspirante a actriz de Hollywood, apareció muerta en un sector aislado de Los Ángeles. Su cuerpo presentó mutilaciones severas, entre ellas la división a la altura de la cintura y cortes en el rostro que formaban una sonrisa forzada. El caso se convirtió en uno de los asesinatos más impactantes del siglo XX en Estados Unidos.
Ambos expedientes trascendieron el ámbito judicial y se transformaron en íconos de la cultura popular. El homicidio de Short inspiró la película Dalia Negra de 2006, dirigida por Brian De Palma. El caso del Zodíaco llegó al cine en 2007 con el filme Zodíaco, bajo la dirección de David Fincher.
La investigación actual la lidera una unidad especializada en casos sin resolver, encabezada por el consultor Alex Baber. El equipo sostiene que logró identificar al presunto responsable tras más de medio siglo de incertidumbre.
La firma Cold Case Consultants of America utilizó inteligencia artificial, registros del censo divulgados recientemente y técnicas de criptografía clásica. El cruce de datos del caso del Zodíaco llevó a un nombre que también figuró como sospechoso principal en el asesinato de Short.
Según Baber, las evidencias señalan a un individuo con formación médica, capaz de realizar las mutilaciones observadas en el crimen de 1947. Además, el sospechoso tenía vínculos con la decodificación de mensajes militares y regresó de la Segunda Guerra Mundial con una bayoneta idéntica a la utilizada en uno de los ataques del Zodíaco. Una confesión en su lecho de muerte aparece como el nexo final entre ambos casos.
El Daily Mail, medio que tuvo acceso a los hallazgos, identificó al presunto criminal como Marvin Skipton Margolis. De ascendencia rusa y polaca, sirvió como paramédico durante la guerra. Registros militares indican que quedó enterrado en una cueva en Okinawa, Japón, y que debió cavar para sobrevivir. Informes posteriores describieron su conducta como resentida y apática, con tendencia a la agresión.
Margolis salió de la Marina por invalidez mental. Volvió a Estados Unidos con un rifle y una bayoneta japonesa distintiva, objeto que los investigadores consideran clave en la conexión con los asesinatos del Zodíaco.
En la década de 1940, el sospechoso estudió medicina en la Universidad del Sur de California (USC). En ese periodo mantuvo una relación breve y conflictiva con Elizabeth Short, lo que lo colocó en la lista de 22 sospechosos del homicidio tras la muerte de la actriz.
Después del crimen, Margolis abandonó Los Ángeles y se trasladó a otros estados. Años más tarde regresó a California, poco antes del primer ataque confirmado del Zodíaco. Los investigadores consideran que el nombre Zodíaco guardó relación con el sitio donde Short murió en 1947.
En sus últimos años, tras recibir un diagnóstico de cáncer terminal, Margolis adoptó el nombre de Marvin Merrill. En ese periodo realizó un dibujo perturbador que mostraba a una mujer llamada Elizabeth y una palabra aparentemente oculta: ZoDiac. Para Baber, ese elemento constituyó una confesión final.
El contenido de la investigación se encuentra bajo análisis del Departamento de Policía de San Francisco, las oficinas de los alguaciles de Napa y Solano y el FBI. En Los Ángeles, el jefe policial Jim McDonnell ordenó a la división de robos y homicidios revisar los hallazgos relacionados con la Dalia Negra.
Los resultados dieron origen a un podcast en inglés y se prevé su adaptación a una serie documental para televisión.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.
