Un grupo de presuntos extremistas musulmante decapitó a por lo menos 27 personas en la provincia de Ain Defla, 130 kilómetros al suroeste de Argelia, informaron ayer fuerzas de seguridad.
Al citar un informe de las fuerzas de seguridad, la agencia de noticias APS dijo que dos personas resultaron heridas en el incidente, que ocurrió el domingo por la noche.
El texto dijo que 27 personas fueron "cobardemente asesinadas por un grupo de terroristas", que es el término empleado por las autoridades para calificar a los militantes musulmanes cuando estos degüellan a sus víctimas.
Argelia ha estado sacudida por la violencia desde principios de 1992, cuando el Gobierno canceló unas elecciones generales en las que parecían estar ganando los islamistas.
Más de 65.000 personas han sido asesinadas desde entonces, según cálculos occidentales.
En la provincia de Ain Defla se han realizado varios ataques contra civiles inocentes, de los que las autoridades señalan como culpables a los grupos de extremistas musulmanes.
Violencia creciente
El más reciente de estos ataques fue el 29 de agosto, cuando 10 civiles fueron decapitados por atacantes desconocidos.
Una semana antes, siete personas murieron y 11 resultaron heridas en un ataque con bombas contra un tren de pasajeros en la provincia de Ain Defla.
Otro ataque sucedió el 24 de junio, cuando supuestos rebeldes islamistas decapitaron a 17 civiles en la provincia de Saida, 325 kilómetros al suroeste de la capital Argel.
Según cifras del pro gubernamental Observatorio Nacional de Derechos Humanos, 4.643 civiles fueron asesinados en 1997 en 554 ataques de militantes del radical Grupo Armado Islámico (GAI).
En su informe anual, difundido por el diario árabe El Jabar, el grupo de derechos humanos dijo que durante la segunda mitad de 1997 "la seguridad se deterioró notablemente en el país y se registraron masacres sucesivas en pueblos y aldeas en los que murieron, tan sólo en ese periodo, 3.163 civiles".
El informe no dijo cuántos rebeldes musulmanes y soldados han muerto durante los enfrentamientos y tampoco dio el saldo de los civiles muertos en 1998.