La estructura pétrea conocida como Intihuatana o reloj solar, en la célebre ciudadela incaica Machu Picchu, resultó dañada al caerle encima el brazo de una grúa mecánica, durante el rodaje de un comercial de televisión, informó ayer la prensa.
El Intihuatana, que en lenguaje quechua significa "donde se amarra el sol", sufrió la ruptura de una arista superior de su estructura en una dimensión de ocho centímetros de largo por seis de ancho y tres de profundidad, y esta piedra se partió en seis pedazos.
El presidente Alberto Fujimori condenó ayer como un hecho "grave" los daños causados al Intihuatana.
"El daño al Intihuatana es un grave atentado contra el patrimonio cultural de la nación", dijo Fujimori a reporteros, durante un viaje de trabajo en la ciudad del Cusco, la antigua capital del Imperio Incaico, 565 kilómetros al sureste de Lima.
Una productora, contratada por la agencia publicitaria transnacional J. Walter Thompson, realizaba el viernes pasado un comercial de televisión para la empresa peruana Cervesur.
Asimismo, propuso a los canales de televisión no propalar publicidad grabada en los alrededores del Intihuatana, que se alza en el sector principal de las famosas ruinas incas.
El Instituto Nacional de Cultura (INC) en Cusco había autorizado el ingreso de 30 personas al santuario histórico, así como un "equipo mínimo" para la filmación del comercial, pero dijo que subrepticiamente la productora ingresó una grúa desarmable.
El director del INC, Gustavo Manrique, expresó que habían entablado una denuncia ante la fiscalía, por lo sucedido.
En Perú, existe el delito por destrucción de patrimonio, que se sanciona con entre dos y cuatro años de prisión.
Cervesur dijo que no se sentía responsable por lo ocurrido.
Su reconstrucción demandará técnicas avanzadas con empleo de sustancias químicas o compuestos sintéticos, dijeron expertos.