
Berlín. EFE. El Dalái Lama reclamó ayer en Fráncfort (oeste de Alemania), una “verdadera autonomía” del Tíbet dentro de China, en su primera parada de una gira de cinco días por varias ciudades alemanas.
El líder tibetano, que se entrevistó con el jefe en funciones del Gobierno regional de Hesse, el cristianodemócrata Roland Koch, sostuvo que el Tíbet no pretende independizarse de China y afirmó que las negociaciones con las autoridades chinas necesitan una confianza, que, de momento, “falta”.
Afirmó que se siente “muy afectado” por las víctimas del terremoto que ha causado, al menos, 50.000 muertos en China e instó a “rezar por ellos”.
Koch afirmó tras el encuentro que la situación del Tíbet y del Dalái Lama es actualmente “muy difícil” y defendió que se respeten los derechos culturales y religiosos de los tibetanos.
En su opinión, las próximas Olimpiadas de Pekín, a efectuarse en agosto, son una buena oportunidad para que China “se abra”.
A su paso por Berlín, previsto para el lunes, el Dalái Lama se reunirá con la ministra de Cooperación Económica y Ayuda al Desarrollo, Heidemarie Wieczorek-Zeul, que lo recibirá en nombre del Gobierno alemán.
El encuentro lo anunció ayer el viceportavoz del Ejecutivo federal, Thomas Steg, después de la polémica suscitada tras saberse que el ministro de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, no le concedió una audiencia al Dalái Lama.
Medios de comunicación, políticos y asociaciones acusaron al Gobierno alemán de someterse a la presión de China, algo que Steg rechazó y aludió, sin embargo, a “ problemas de agenda”.