Caracas. El presidente venezolano, Hugo Chávez, separó del cargo a su ministro de Interior y Justicia, Luis Miquilena, en medio de rumores sobre discrepancias entre ambos por el clima político que reina en el país.
Como sucesor, Chávez designó al capitán retirado Ramón Rodríguez Chacín, el quinto en llegar a ese puesto, según un reporte de la estatal Venezolana de Televisión.
Rodríguez al igual que Chávez fue encarcelado dos años por participar en una de las dos fracasadas conjuras militares contra el expresidente Carlos Andrés Pérez.
El mandatario anunció además el nombramiento de su exvicepresidente Adina Bastidas como nuevo ministro de Producción y Comercio, en sustitución de Luisa Romero, que ocupó ese cargo por espacio de dos años.
No hubo detalles sobre los retiros en el reporte de la televisora.
Muchas dudas
La salida de Miquilena se produce en momentos cuando Chávez es agobiado por una creciente oposición que se ha extendido a los sectores empresarial y sindical, una popularidad disminuida y un amenazante panorama económico.
Chávez también enfrenta fisuras en el partido de gobierno, que se debate su dirección entre un ala radical apoyada por él y que se opone a acuerdos con grupos opositores, y otra que propone atender la crítica de la oposición, entre la cual se encontraría Miquilena.
Fuentes periodísticas aseguraron que la remoción de Miquilena "era algo muy predecible", dado el grado de desavenencias con el Presidente.
Incluso, indicaron que las diferencias entre ambos fueron más evidentes a partir del 10 de diciembre pasado, tras el paro laboral protagonizado por los empresarios.