
“Se está recuperando”, dijo el ministro de Información, Andrés Izarra, quien agregó que el sábado, el mandatario de 56 años siguió al detalle desde La Habana las actividades de su gobierno.
“Ya lo vieron
“Hay Chávez para rato”, también dijo ayer el vicepresidente venezolano, Elías Jaua.
En el mismo sentido, el presidente de la Asamblea Nacional (Parlamento), Fernando Soto Rojas, negó ayer los rumores que apuntan que el presidente tiene cáncer y confió en que esté de regreso a Caracas el 5 de julio.
“Yo sería el primero que informaría al país. Chávez se está recuperando y lo tendremos aquí, Dios gracias, el 5 de julio”, dijo Soto en referencia al día cuando Venezuela celebrará el bicentenario de la firma de su independencia y será escenario de una cumbre de líderes latinoamericanos.
Lo único que el Gobierno ha dicho es que Chávez fue operado de urgencia el 10 de junio en La Habana de un absceso pélvico, una acumulación de pus localizada en la zona baja del abdomen.
No obstante, más de dos semanas luego, el Ejecutivo sigue sin divulgar un solo boletín médico y las únicas informaciones de su mal las ofreció el propio presidente, en un breve mensaje en televisión el 12 de junio pasado.
Esa fue la última vez que Chávez intervino de viva voz en un medio de comunicación, hecho inédito en Venezuela, donde el político realiza alocuciones casi a diario. Desde ese día, su gabinete multiplica los mensajes tranquilizadores.
En forma paralela, una de las columnas de opinión más leídas en Venezuela, “Los Runrunes” de Nelson Bocaranda y publicada ayer en el diario
“Se determinó que había un cáncer y que debía comenzarse su tratamiento de inmediato. Radiación y bloqueo hormonal comenzaron a aplicarse”, afirma su autor para quien Chávez desea a toda costa acudir a la cumbre latinoamericana del 5 de julio en Caracas.
Todas estas informaciones y el silencio oficial, estimulan incesantes rumores en Venezuela, donde la salud de Chávez es ahora la gran preocupación de los ciudadanos.
En las calles de Caracas, casi nadie cree en el absceso pélvico del presidente y las especulaciones se multiplican: cura de reposo en La Habana junto a su padre político Fidel Castro, estrategia electoral, operación de cirugía estética, depresión, mal de amores: la imaginación es fértil cuando no se tiene información oficial.
Según Elsa Cardozo, doctora en Ciencias Políticas y profesora de Relaciones Internacionales de la Universidad Central de Venezuela, la incertidumbre es doble: conocer el estado de salud real del político y saber dónde está la cabeza visible del poder ahora.
“La razón del bloqueo de información especializada puede ser una estrategia previa para el gran relanzamiento presidencial. La idea sería estimular el surgimiento de rumores negativos que hagan más espectacular el regreso presidencial”, opinó Luis Vicente León, responsable de la firma de encuestas local Datanálisis.