“Después de la detención de su hermano (Francisco Javier Arellano Félix, en agosto del 2006), la responsabilidad operativa recae en Eduardo pero de manera gradual va asumiendo esta función su sobrino”, explicó el subsecretario de Estrategia e Inteligencia Policial, Facundo Rosas.
Al cartel de los Arellano Félix, uno de los principales grupos traficantes de droga del mundo, también se le conoce como el cartel de Tijuana porque opera en esta ciudad fronteriza con San Diego, en Estados Unidos.
El Doctor , de 51 años, era buscado por la Interpol y por Estados Unidos, que ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares, por su vinculación al narcotráfico y a otras actividades criminales.
Al verse rodeado, el sospechoso disparó contra los agentes federales y se atrincheró en la vivienda, donde después fue encontrada una niña de 11 años de la cual no se ha hecho pública su relación, aunque versiones extraoficiales indican que es su hija.
Rosas aseguró que si bien el detenido fue paulatinamente desplazado del mando del cartel “no dudamos que tenga todavía una ascendencia muy fuerte sobre los demás integrantes, tanto familiares del mismo apellido como de los que se han incorporado”.
De los seis hermanos Arellano Félix, tres están detenidos (Eduardo, Benjamín y Francisco Javier), uno fue liberado en marzo tras 15 años de prisión (Francisco Rafael), otro murió en un enfrentamiento con la Policía mexicana en el 2002 (Ramón) mientras que la única hermana, Enedina, dirigente y madre del actual líder del cartel, no ha sido capturada nunca.