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El proceso de nacionalizaciones desarrollado por el presidente venezolano, Hugo Chávez, ha incluido negocios de sectores tan diferentes como industrias de generación eléctrica, explotación petrolera y telecomunicaciones, supermercados, industria alimentaria y la agroindustria.
Muchas se han concretado, otras se han quedado en amenaza. Entre los casos más llamativos está el del canal de TV Globovisión y el de alimentos Polar.
Empresas Polar S. A. es la mayor corporación de bebidas y alimentos en Venezuela y ya fue objeto de expropiación de varios terrenos industriales en el estado de Barquisimiento.
Su presidente, Lorenzo Mendoza, es citado con frecuencia por Chávez en sus discursos cuando habla de las estatizaciones.
En Globovisión la situación es distinta. No está bajo control estatal, pero este ya se hizo con un 20% al intervenir el Banco Federal.
Aquí, el interés es controlar al principal canal de noticias privado y de oposición.
El mandatario anunció el 21 de julio que el Estado busca hacerse con el 45,8% de las acciones para controlarlo. En declaraciones citadas por el diario El Nacional de Venezuela, Chávez aseveró: “No estamos expropiando, nos estamos incorporado al negocio”.
En algunas oportunidades su interés es eliminar opositores que cuestionan sus acciones políticas (Globovisión) y en otros tratar de consolidar la presencia del gobierno en la economía nacional.
El proceso de expropiaciones está salpicado de irregularidades. Ese fue es el caso de la empresa Fama de América, una torrefactora de café en la que el gobierno pagó solo el 10% del valor que sus mismos peritos definieron.
Con esa nacionalización y la compra de parte de las acciones de Café Madrid, el gobierno tomó el control de más de 60% del mercado de ese grano en el país.
