EscucharUna grave situación alimentaria persiste en 34 países del mundo, entre ellos Cuba, Nicaragua, Honduras, Venezuela y Haití, indicó ayer la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
La entidad lanzó además un grito de alarma por la situación en Etiopía, "donde más de 8 millones de personas" corren el riesgo de morir de hambre tras tres años de sequía.
Las previsiones son desfavorables también para numerosos países, que se enfrentarán a situaciones de escasez, según precisó la entidad en su informe anual Perspectivas Alimentarias, publicado en Roma.
El continente más afectado es África, y en particular los países de la zona este, donde "cerca de 16 millones de personas se enfrentan a una falta crítica de alimentos", subrayó la FAO, que desde hace varios meses está denunciando la situación en esa zona del mundo.
En América Latina, debido a las catástrofes naturales, será repartida ayuda alimentaria a Cuba, Honduras, Nicaragua, Venezuela, Salvador y Guatemala.
Los países centroamericanos, devastados por el huracán Mitch a finales de 1998, seguirán beneficiándose de los programas de reconstrucción del gobierno y apoyados por las entidades internacionales, afirmó la FAO. Haití, continuará a recibir ayuda en alimentos debido a sus "problemas económicos estructurales", estimó la organización.
En Europa, la situación más grave se registra en Yugoslavia, donde "cerca de dos millones de personas necesitan ayuda alimentaria", tras los diferentes conflictos registrados en la región.
Chechenia, junto con las poblaciones vecinas (Ingushia), necesita igualmente ayuda debido al elevado número de refugiados de la región que huyen de los combates en la república independentista.
La primera previsión de la FAO sobre la producción mundial de cereales en el año 2000 es de 1.890 millones de toneladas, alrededor del 1 por ciento más que en 1999.
Se prevé un volumen de trigo de 595 millones de toneladas, un 1 por ciento más que en 1999; el de cereales secundarios será de 900 millones de toneladas, casi un 3 por ciento más, mientras se cree que la producción de arroz (cálculo sobre el arroz elaborado) disminuirá aproximadamente de un 1 por ciento, dando como resultado 395 millones de toneladas.
