La Madeleine, Francia
Un autobús español que transportaba 59 personas de Bilbao a Ámsterdam sufrió esta madrugada un accidente en el túnel de La Madeleine, en Lille, en el norte de Francia, con un balance provisional de seis heridos graves -cinco en estado crítico- y 28 heridos leves.
El autobús se quedó encajado en el citado túnel, al no tener la altura suficiente, y el impacto arrancó el techo del mismo.
El accidente tuvo lugar en La Madeleine, cerca de la ciudad de Lille, hacia las 5:30 a. m. de Francia (9:30 p. m. en Costa Rica), en un pequeño túnel con una señal prohibiendo el paso a los vehículos de más de 2,6 metros de altura.
La mayoría de los pasajeros eran jóvenes de entre 18 y 29 años, quienes habían salido de Bilbao (norte de España) y se dirigían a Ámsterdam (Holanda).
Un balance publicado a media jornada por el hospital de Lille dio cuenta de 34 heridos, entre ellos, seis pacientes en estado grave, cinco de ellos con pronóstico muy grave.
El resto de pasajeros, un total de 25, se quedaron en un pabellón deportivo a la espera de volver a España.
Carlota, Ane y Nerea, tres chicas de 18 y 19 años del País Vasco, iban en el autobús y todavía tenían dificultades para asimilar lo ocurrido.
"La mayoría de la gente estaba durmiendo. Yo acababa de hablar con Ane y no supimos lo que pasó", explicó Carlota, que como otras víctimas del accidente.
"Fue horrible", contó Ane. "De golpe el techo del túnel estaba ahí", dijo por su parte Carlota, haciendo un gesto con la mano para explicar que podía tocarlo.
Según su testimonio, los heridos más graves estaban en la parte trasera del autobús, donde fueron a parar los escombros provocados por el impacto, y cree que probablemente la parte de atrás estaba más elevada que el resto.
Tensión y caos. En el lugar de los hechos, muchos pasajeros esperaban en colchones su transporte a casa, luego del traslado de los heridos al hospital.
Algunos salían al exterior a tomar el aire mientras una chica lloraba desconsoladamente cubierta con una manta y acompañada de una amiga con varios rasguños en la nariz.
"Están descansando, sabemos que el estrés agota, están juntos y han llamado a sus familias. Estamos actuando en colaboración con los bomberos y las autoridades municipales", explicó François Ducrocq, un psiquiatra que dirige la unidad de urgencia puesta en marcha tras el siniestro.
Un joven con rasguños en la cara explicó que estaba durmiendo y que no oyó ningún ruido antes del choque.
Fumando fuera del pabellón, mostró un vídeo en su teléfono móvil filmado poco después del accidente, donde se ve la cara pálida de su compañero de asiento que se quita restos de cristal.
El viaje, organizado por una agencia de viajes vasca, estaba previsto entre el 25 de julio y el 1 de agosto.
Los jóvenes iban a dormir en un campamento y habían previsto varias excursiones, explicó la agencia, contactada por la AFP.
Los viajeros salieron el sábado por la tarde y venían de Bilbao pero también de San Sebastián y Vitoria, ciudades españolas.
El chofer que ba al volante, cuando ocurrió el accidente, estaba bajo custodia policial, indicó la fiscalía de Lille.
Las pruebas de alcoholemia y de estupefacientes dieron negativo y se había requisado el tacógrafo, precisó el fiscal de Lille Frédéric Fèvre.
Según la prefectura, los dos choferes del autocar efectúan el trayecto regularmente pero por alguna razón desconocida decidieron cambiar su ruta habitual.
"Hemos visto muchas camionetas quedarse bloqueadas en el túnel pero es la primera vez que veo un autocar", dijo Christian Janssens, viceacalde de La Madeleine.