
Londres. EFE. El número de disidentes del ya inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA) en el Ulster, que están dispuestos a emplear la violencia para descarrilar el proceso de paz que comenzó hace 11 años en la provincia, no supera los 300.
Así lo afirmó ayer el jefe de la Policía autónoma norirlandesa (PSNI) , Hugh Orde, quien aseguró a la BBC que los informes de los servicios de inteligencia muestran que el número de partidarios de la violencia es un porcentaje mínimo entre la población del Ulster.
Orde añadió que “la amenaza, por supuesto, es muy peligrosa, algo que ha quedado en evidencia en la última semana (con el asesinato de dos soldados y un policía), pero es un grupo muy pequeño”.
“300 personas en una población de 1,7 millones de personas lo pone en perspectiva, pero es una amenaza que nos tomamos muy en serio. Nos hemos movilizado y se han realizado ya varias detenciones” , declaró el jefe de policía.
Nueve personas han sido detenidas en las últimas horas en distintos puntos de Irlanda del Norte para interrogarlas sobre el asesinato de dos soldados el sábado 7 de marzo y de un policía el lunes 9.
Orde tachó de “ridículas” las informaciones publicadas estos días en la prensa acerca de que los disidentes del IRA, integrados en los llamados IRA Auténtico e IRA de Continuidad, están preparando nuevos atentados contra políticos en otros puntos del Reino Unido.
“El trabajo de la Policía en estos momentos consiste en centrarse en lo que está ocurriendo en Irlanda del Norte, donde el Ejército y las fuerzas de seguridad siguen siendo los objetivos principales”, explicó Orde, quien aseguró que no tiene intención de pedir refuerzos militares para controlar la situación.
Los asesinatos de la semana antepasada, que han sembrado inquietud sobre la continuidad del proceso de paz nacido de los Acuerdos de Viernes Santo firmados en 1998, fueron rechazados masivamente el miércoles por la población con manifestaciones en las principales localidades de la provincia.
Las iglesias católica, presbiteriana y metodista celebraron ayer un acto religioso conjunto en el que pidieron a sus fieles que luzcan lazos morados en señal de rechazo de la violencia.