Dos atacantes penetraron aproximadamente a las 08:00 local en un camión en un puesto policial en la ciudad de Kashgar, también conocida como Kashi, en la provincia de Xinjiang, lanzando dos granadas que explotaron contra los efectivos, señaló Xinhua citando fuentes policiales.
Los atacantes fueron detenidos, sin que trascendieran su identidad ni sus móviles. La policía de Kashgar y la oficina de informacióndes de la región no sabía nada del ataque.
Las fuerzas de seguridad chinas habían advertido en reiteradas ocasiones ante la inminente apertura de los Juegos Olímpicos de Pekín que se podrían producir atentados de separatistas uigures, asentados en la región noroccidental de China.
El portavoz del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Pekín (BOCOG), Sun Weide, destacó ante la prensa tras conocerse el atentado que China estaba en condiciones de "organizar Juegos seguros y pacíficos".
Xinjiang, habitada por ocho millones de uigures musulmanes, es considerada una región conflictiva. Tras la creación de la República Popular China en 1949 fue incorporada por los comunistas al territorio chino.
Muchos uigures, de tradición étnica y cultural diferenciada, se resisten a aceptar el dominio chino y denuncian que sufren una represión cultural y política. Algunos reivindican la recuperación de la antigua República de Turkestán Oriental.