EscucharBerna, 13 mar (EFE).- La aerolínea helvética Swiss International Air Lines confirmó hoy que negocia con Lufthansa su venta a esta compañía aérea alemana, pero conservará su nombre y su plataforma internacional en la ciudad suiza de Zúrich.
La confirmación de esa operación por parte de la aerolínea helvética se produce tras los intensos rumores en los medios de comunicación suizos y alemanes de que la absorción de Swiss por parte de Lufthansa estaba ya en marcha.
Swiss, mediante un comunicado de prensa, confirmó hoy que ambas empresas están llevando a cabo "negociaciones constructivas sobre la adquisición de Swiss y su integración en el grupo Lufthansa".
La compañía aérea helvética dijo que el modelo de integración en la alemana deberá ser decidido tanto por el consejo de administración de Lufthansa, como por el de la misma Swiss y sus accionistas.
El transportista suizo, dice el comunicado, mantendrá su infraestructura de tráfico aéreo en Suiza, así como su nombre comercial, Swiss.
La aerolínea alemana, por su parte, confirmó en Berlín que los dos transportistas estaban trabajando en el proyecto común de la integración de Swiss en el grupo de Lufthansa, señalaron los medios de comunicación helvéticos.
Asimismo dijeron que la empresa suiza reunirá mañana, lunes, en Zurich, a su consejo de administración y a sus principales accionistas, que son además de la Confederación Helvética y el estado de Zurich, los dos grandes bancos helvéticos, como son el UBS y el Crédit Suisse (CS).
Una vez logradas las autorizaciones, la empresa alemana someterá una oferta a sus accionistas sobre la base de la cotización en bolsa durante las últimas semanas, agrega el comunicado.
Este anuncio se produce 48 horas después de que la aerolínea helvética informase de que en 2004 redujo sus pérdidas netas a unos 90,3 millones de euros, frente a los 443 millones de euros de 2003.
La aerolínea helvética experimentó igualmente un retroceso del 11,7 por ciento en su volumen de negocios, que en 2004 fue de 2.350 millones de euros, lo que se atribuyó a las medidas de racionalización emprendidas por la empresa.
El presidente de la compañía, Christoph Franz, admitió que aunque en cada trimestre del pasado ejercicio los resultados superaron los del año anterior, "no eran satisfactorios", y señaló que esperaba los primeros beneficios operativos para 2006.
Con los parámetros actuales, portavoces de la aerolínea dijeron que sería muy difícil lograr resultados equilibrados en 2005 si no se aplican sin demora medidas suplementarias para redimensionar la compañía, entre las que se mencionan una reducción de su flota y el recorte de puestos de trabajo.
La elaboración del proyecto de absorción de Swiss por Lufthansa ha estado a cargo personal de sus dos directores, Christoph Franz y Wolfgang Mayrhuber, respectivamente, según la prensa helvética.
Los medios de comunicación de este país habían indicado que el plazo de la realización de la operación iba a depender sobre todo de "medidas de reestructuración muy duras, sin excluir un aumento de capital que Lufthansa exigiría, como ya hizo en septiembre de 2003".
La aerolínea alemana ya expresó entonces interés por la helvética, pero pedía también que se sanease la situación de Swiss con medidas equivalentes a 320 millones de euros, a lo que los principales accionistas de la compañía suiza se opusieron. EFE
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