Toronto. El Banco de Nova Scotia anunció ayer que está asumiendo el control del banco Sud Americano en Chile, en un nuevo paso de la agresiva expansión de esa institución financiera canadiense en el sector bancario de América Latina.
Scotiabank, que ya controlaba 28 por ciento del Banco Sud Americano, dijo que pagará $115 millones al grupo Borda-García por otro 32,6 por ciento, con lo que su participación en la propiedad del banco chileno aumentará al 60,6 por ciento.
El Scotiabank ya ha invertido $700 millones en bancos de América Latina, desde México a Chile, pasando por América Central y Venezuela.
Scotiabank tiene las siguientes propiedades en América Latina:
El 10 por ciento del Grupo Financiero Inverlat, de México, con una opción a aumentar su participación al 55 por ciento.
Total propiedad de Scotiabank Quilmes, de Argentina.
El 80 por ciento de la Corporación Mercaban de Costa Rica.
El 53 por ciento de Ahorromet-Scotiabank, de El Salvador.
El 25 por ciento del Banco Sudamericano, del Perú.
El 27 por ciento del Banco del Caribe, de Venezuela.
Esas operaciones convierten al Scotiabank en el principal inversor canadiense en el sector financiero de América Latina, junto al Banco de Montreal, que es dueño del 16 por ciento del Bancomer de México.
Expertos canadienses consideran que América Latina tiene un sector financiero que necesita ser desarrollado, para lo cual tiene un enorme potencial.
Chile tiene un acuerdo de libre comercio con Canadá y algunas de sus empresas mineras y de energía tienen proyectos en esa nación.
Banco Sud Americano, con sede en la capital, Santiago de Chile, tiene un capital de $3.100 millones y tiene 78 sucursales, con 1.600 empleados.