Cartagena (Colombia), 7 nov (EFE).- El Palacio de la Inquisición, en el que funcionó el Santo Oficio durante dos siglos en la ciudad colombiana de Cartagena de Indias, reabrió hoy sus puertas tras una restauración en la que se invirtió más de un millón de dólares.
El arquitecto Fidias Alvarez, responsable de los trabajos, explicó que la restauración incluyó refuerzos en los cimientos, vigas y artesonados de madera y la instalación de nuevas tuberías, cables eléctricos, sistemas de control de incendios y circuitos cerrados de televisión.
La casona colonial, sometida a remodelación durante casi dos años, se construyó en 1770 y tiene un portal barroco labrado en piedra.
En el edificio funcionará el Museo Histórico de Cartagena, ciudad declarada en 1984 como patrimonio histórico y cultural de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Además, habrá dos salas para exposiciones de arte y una especial para niños, aparte de los salones en los que se exhiben los instrumentos de tortura utilizados durante los tiempos de la inquisición.
La inquisición, establecida en Cartagena en 1610, permaneció en esa ciudad del Caribe colombiano hasta 1811, pero el tribunal se instauró otra vez en 1815 durante seis años más, hasta 1821, cuando desapareció definitivamente.
Durante su funcionamiento en Cartagena, más de 760 personas fueron condenadas por los inquisidores por "herejes" y seis de ellas quemadas en la hoguera. EFE
gta/hma