Naciones Unidas, 22 abr (EFE).- El viceministro de Construcción y Saneamiento de Perú, Jorge Villacorta, alertó hoy que si los países ricos no cumplen con sus compromisos de asistencia al desarrollo, las naciones pobres no podrán alcanzar los Objetivos del Milenio.
Así lo manifestó en declaraciones a EFE, tras participar en la reunión ministerial de la Comisión de Desarrollo Sostenible de la ONU, que hoy concluye y que ha centrado sus discusiones en asuntos relacionado con el agua, el saneamiento y los asentamientos urbanos.
"La posición de Perú es que se cumplan con los compromisos de la Conferencia de Financiación al Desarrollo de Monterrey (México), de destinar el 0,7 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB), si quieren que los países en desarrollo alcancen los Objetivos del Milenio", declaró.
El viceministro se remitió a las cifras de la ONU que muestran que son necesarios 100.000 millones de dólares para que las naciones en desarrollo logren los Objetivos del Milenio en el 2015, mientras que si los países donantes hicieran efectivas sus aportaciones del 0,7 por ciento representarían sólo 50.000 millones de dólares.
"Si los países ricos no hacen sus tareas, va a ser difícil que las naciones más pobres también lo hagan, pues es imposible cubrir la diferencia con recursos propios", precisó.
En el caso de Perú, manifestó que las inversiones previstas para cumplir con los Objetivos del Milenio, referidas al agua y al saneamiento, ascienden a 4.063 millones de dólares, pero el gobierno tiene programado durante el período 2005-2008 proyectos con una inversión de 1.308 millones, tanto en el ámbito urbano como rural.
Así pues, enfatizó, resta por cubrir para el período 2009-2015 un monto de 2.755 millones de dólares, que significan el 68 por ciento de la inversión requerida.
Villacorta propugnó alianzas estratégicas dentro del propio sector público y entre éste y la empresa privada para iniciativas de inversión destinadas al mejoramiento de la distribución del agua y del alcantarillado en los países en desarrollo.
Se calcula que 1.200 millones de personas de las naciones en desarrollo carecen de acceso a agua potable, y 2.600 millones -la mitad de la población de estos países- no cuenta con infraestructuras de saneamiento, según cifras de la ONU.
En su disertación en la Comisión, Villacorta dijo que la cuenca amazónica posee el 26 por ciento del agua dulce en el mundo y Perú dispone del 25 por ciento de ella, mientras que en la costa peruana, en donde se concentra la mayor población urbana, sufre de escasez de agua.
Subrayó que el acceso al agua potable y al saneamiento va asociado a la salud y a la calidad de vida de la población, así como también es una cuestión de dignidad humana.
"Las personas que no tienen acceso al agua potable no se consideran pobres, sino excluidos y ello genera conflicto social, lo que afecta a la gobernabilidad y a la democracia de un país", afirmó.
Durante la sesión ministerial de la Comisión, se hicieron patentes las profundas diferencias entre los países industrializados y los de vías en desarrollo en cuanto a la financiación y la gestión de los recursos hídricos y el saneamiento.
Villacorta destacó que el objetivo es superar la pobreza mediante una gestión estructural y productiva de la economía, y con tecnología moderna que reduzca costos y promueva la eficacia, y no sólo de soluciones momentáneas y asistenciales. EFE
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