
Con la formalización de la venta de Pipasa al gigante estadounidense Cargill, anunciada ayer, el mercado local de la carne de pollo queda en manos extranjeras.
Los otros dos grandes actores en el negocio son la guatemalteca División Industrial Pecuaria (dueña de Pollos del Rey y Pollos Tío Pepe) y Avícola Ricura, propiedad de Walmart.
Según datos del sector avícola, Pipasa tiene una cuota de mercado superior al 60%, lo cual la convierte en la empresa local más grande en la venta de pollo.
Edel Solís, directora de la Cámara Nacional de Embutidores, agregó que Pipasa, además, posee el 30% del mercado de los embutidos, tales como mortadelas, salchichones y salchichas de pollo, res y cerdo.
Pipasa tiene 118 centros de distribución en el país, una red de 200 proveedores y una planilla de 4.000 empleados. Por ahora Cargill descarta movimientos de personal.
Además de su marca estrella, la empresa cuenta con otras como Zaragoza, Kimby, As de Oros y Tiquicia, al tiempo que elabora 150 variedades de alimento para animales.
Estos elementos llamaron la atención de Cargill, según reconoció ayer, en entrevista telefónica con
“Pipasa es sinónimo de calidad en sus productos y servicio al consumidor. Todas sus marcas están bien reconocidas en el país”, indicó Burdett.
Añadió que en Cargill están muy complacidos con la compra. “Es algo que hemos querido hacer desde hace mucho tiempo. Hemos tenido planes de crecer en la región y Pipasa había sido uno de los blancos más queridos por nosotros”.
El ejecutivo detalló que la operación se cerró ayer, poco antes del mediodía, después de varios meses de negociaciones. Ayer mismo Cargill tomó control de Pipasa, agregó este representante.
La adquisición también incluyó las operaciones de Pipasa en Nicaragua, donde la empresa tiene una planilla de 1.038 trabajadores.
Luis Carlos Alvarado, gerente de Avícola Ricura, aseguró que esta empresa trabaja de la mano con 45 pequeños productores del país, quienes proveen al gigante detallista del 100% de la carne de pollo y el 58% de los huevos.
Consultado sobre la adquisición de Pipasa por parte de Cargill, Alvarado expresó: “Somos respetuosos de la competencia y consideramos que esta siempre irá en beneficio de los consumidores”.
Descartó que la relación con Cargill –que vende Cinta Azul– se vea afectada por la transacción.
El otro gran competidor es División Industrial Pecuaria, una subsidiaria de la guatemalteca Multi-Inversiones, dueña de la cadena Campero.
En el 2006 la firma adquirió Tío Pepe y Tico Pollo, y en el 2007 lanzó al mercado la marca Pollo Rey, muy popular en Guatemala y en Honduras desde hace varios lustros.
Adicionalmente, la empresa tiene la marca Propokodusa.