Asunción, 19 sep (EFE).- El ex presidente paraguayo Luis González Macchi negó hoy ante la Fiscalía los cargos de los que se le acusa en el marco de la causa que se sigue por el presunto manejo irregular del fracasado proceso de privatizaciones.
González Macchi compareció hoy ante la fiscal Elsa García, que investiga la presunta contratación irregular de un escribano amigo del ex mandatario para la transformación societaria de la telefónica del Estado, la Compañía Paraguaya de Comunicaciones (COPACO), por alrededor de medio millón de dólares.
El ex mandatario, contra el que pesan dos prohibiciones judiciales de abandonar el país, dijo que no hubo ninguna orden del Gobierno para que se realizara la contratación del escribano Jorge Fernández y defendió la regularidad del proceso de venta de la telefónica pública.
"El Ejecutivo se expresa ante cualquier entidad a través de un decreto y en los escritos donde se menciona la ampliación de acciones de la firma COPACO S.A. no se menciona en ningún momento que se haga por un escribano del registro, ni de la escribana mayor, ni mucho menos que se contrate al escribano Jorge Fernández", dijo.
"Ni mucho menos el monto de sus honorarios profesionales (del escribano)", agregó.
El ex presidente aseguró que el "proceso de privatizaciones ha estado instaurado siempre con la asesoría económica y financiera del Banco Santander y la parte jurídica por parte de McKenzie", por lo que defendió la transparencia del proceso de privatizaciones, que fracasó a mediados del año pasado tras varios días de protestas de campesinos.
El gobierno paraguayo contó con la asesoría técnica y financiera en la privatización del español Grupo Santander Central Hispano y del despacho de abogados estadounidense Baker and McKenzie, que según González Macchi "respaldaron las decisiones financieras y jurídicas".
González Macchi, que abandonó la Jefatura del Estado el pasado 15 de agosto, está procesado en calidad de autor de un delito de lesión de confianza en esta causa, en la que también está encausado el ex secretario de la Reforma Ernesto Villamayor.
Además, el ex presidente está procesado como instigador de otro delito de lesión de confianza en el presunto desvío irregular de 16 millones de dólares de dos bancos intervenidos a una cuenta privada en Estados Unidos durante su gestión. EFE
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