Existen herramientas analíticas que facilitan la consecución de los objetivos de rentabilidad esperados por los socios del negocio.
Por ejemplo, en 1914, el ingeniero F. Donaldson Brown, inventó una fórmula, conocida como DuPont, que es el conjunto de una serie de razones o indicadores financieros que explican de qué depende la rentabilidad de un negocio, que es resultado de la capacidad de la administración de combinar tres factores fundamentales: eficiencia, eficacia y apalancamiento.
Por eficiencia se entiende el margen de utilidad neta por cada colón vendido. Se mide como el porcentaje de las ventas (VT) que queda como utilidad (UN). Eficiencia, entonces, es igual a UN/VT. Por eficacia , el total de ventas (VT) que se obtienen por el uso o rotación de todos los recursos que en promedio se han mantenido invertidos en la empresa, conocidos como activos totales promedio (AT). De esa manera, eficacia es igual a VT/AT.
Finalmente, el apalancamiento es la relación entre los activos promedio (AT) respecto a los recursos promedio aportados por los socios (PAT). Así, apalancamiento es la razón: AT/PAT.
La fórmula de DuPont demuestra que la rentabilidad no es más que el producto de la eficiencia por la eficacia y el apalancamiento:
Rentabilidad= Eficiencia * Eficacia * Apalancamiento.
Por tanto, se puede lograr ser muy exitoso en negocios aumentando su rentabilidad si es capaz de mejorar la eficiencia, la eficacia y el apalancamiento.
Además, la mejora en estos elementos es multiplicativa, es decir, que un 1% de mejora en cualquiera de estos tres factores produce un efecto mayor en la rentabilidad.
Finalmente, la fórmula permite clasificar diferentes tipos de industrias o negocios, según la importancia relativa de cada uno de estos tres elementos. En el caso de la de supermercados se caracteriza por bajos márgenes de utilidad, pero con una altísima rotación de sus activos y un moderado apalancamiento. La construcción pesada tienen márgenes de ventas altos, baja rotación y apalancamiento moderado. El negocio bancario se caracteriza por bajos márgenes, rotación moderada y un altísimo apalancamiento.
Si se usa la fórmula DuPont correctamente, tendremos una alta probabilidad de cumplir la recomendación de una de las personas más adineradas del mundo, Warren Buffett: “La regla número uno en los negocios es no perder dinero nunca y la segunda; no olvidar nunca la regla número uno”.