Estoril Sol invertirá 50 millones en el nuevo Casino de Lisboa

El presidente de Estoril Sol, Mário Assis Ferreira, señala hoy en la edición de Internet de "Expresso" que la inversión tardará muchos años en ser recuperada, aunque, matiza, que "se trata de un proyecto que contará con soluciones únicas en el mundo".

El Casino de Lisboa estará ubicado en el antiguo Pabellón del Futuro, en el recinto de la Expo 98, en el Parque de las Naciones, y contará inicialmente con 1.500 máquinas y 22 mesas de juego, la mitad de la capacidad instalable.

Las futuras instalaciones del Casino de Lisboa serán complementarias del de Estoril (propiedad también de Stanley Ho), ya que éste conservará su clientela tradicional, mientras que el nuevo centro apostará por un público internacional más joven, así como para el turismo de negocios y congresos.

Assis Ferreira asegura que el Casino de Lisboa contará con "una arquitectura de vanguardia e impresionante", que lo convertirá en "un nuevo factor de atracción turística para la ciudad".

Además, explicó que en el plazo de 5 años duplicará sus unidades de juego (1.500 máquinas y 22 mesas en la apertura), pero insistió en que no sólo del juego viven los casinos, ya que, matiza, "en nuestro concepto, los casinos son centros polivalentes de manifestaciones culturales".

"El juego no es más que otra manifestación de ocio entre muchas otras, de hecho en el Casino de Estoril sólo cerca del 50 por ciento de las personas que lo visitan lo hacen para jugar", recordó.

Aunque la cuantía de la inversión par el nuevo casino, 50 millones de euros, necesitará de años para ser amortizada, destaca su experiencia en la gestión de este negocio, que a través del Casino de Estoril supone a la sociedad presidida por Assis Ferreira contar con el 60 por ciento de la cuota de mercado en Portugal.

Los ingresos de Estoril Sol cayeron en 2003 un 3,5 por ciento, tendencia que en opinión de Assis Ferreira puede mejorase ligeramente en 2004.

Además del Casino de Estoril, la sociedad que controla Stanley Ho posee el Casino de Povoa de Varzim, unos 30 kilómetros al norte de Oporto. EFE

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