EscucharSantiago (AFP). Chile mantiene en circulación desde 2008 miles de monedas de 50 pesos que llevan mal escrito el nombre del país, hecho que recién se detectó a fines de 2009 y que motivó el despido esta semana de dos altos funcionarios de la Casa de Moneda, entidad encargada de su acuñación.
Según se aprecia en el anverso de la moneda de 50 pesos (equivalente a unos 10 centavos de dólar), que tiene estampado el rostro del libertador Bernardo O'Higgins, aparece la palabra 'Chiie' en vez de Chile.
Adicionalmente la moneda lleva la firma de un maestro acuñador de monedas que trabajaba en esa institución a pesar de que el Banco Central había solicitado no incluirla.
El doble error, que puso en duda la confiabilidad en la Casa de Moneda, se suma a una serie de irregularidades denunciadas en la acuñación de medallas y monedas conmemorativas, lo que motivó el despido esta semana del director gerente de la institución, Gregorio Iñiguez, así como del acuñador, Pedro Urzúa.
A pesar del error, el Banco Central informó que la moneda tiene valor. Eso sí, si los usuarios prefieren la puedan cambiar en las instalaciones del emisor.
Todo esto ocurrió en 2008, año en que la Casa de Moneda pasó a ser sociedad anónima, un hecho que en su momento generó protestas e inquietudes entre los empleados.
Incluso hubo voces que señalaron que el error con el nombre del país fue intencional como forma de demostrar el malestar.
"Se me ha acusado de que la palabra 'Chiie' fue intencional, pero fue un error que no noté yo ni lo notó toda la cadena de personas que la vio y aprobó después", dijo por su parte Urzúa al diario El Mercurio.
"Se trata de un error gracioso, pero la moneda no pierde su valor por eso", dice a la AFP la especialista en numismática y filatelia, Rosa Lara.
"Además no se puede retirar del mercado porque se lanzó una partida muy grande", precisa Lara, quien dice que, para coleccionistas, esta moneda podría costar el doble de su valor y no más, por ahora, puesto que hay muchas circulando.
Ni la Casa de Moneda ni el Banco Central han informado aún sobre cuántas monedas con el nombre defectuoso están circulando en el país.
Los que sí hay en cambio en la Casa de Moneda es preocupación.
"La empresa está funcionando y cumpliendo sus contratos, pero hay inquietud", informó a la prensa María Eugenia Wagner, presidenta del directorio de la Casa de Moneda.
