Roma, 25 mar (EFE).- El Banco de Italia se ha mostrado crítico con el español BBVA como principal accionista de la Banca Nazionale del Lavoro (BNL), a la espera de hacer pública su posición sobre el anuncio de esa entidad de hacer una oferta pública para adquirir la compañía romana.
A lo largo de hoy, viernes, está prevista la difusión por parte del Banco emisor de la respuesta que debe dar al BBVA después de que éste comunicará el 18 de marzo su intención de proceder a una oferta publica para hacerse con el control de la BNL, en la que es el primer accionista con el 14,7 por ciento del capital.
A lo largo de toda la semana las autoridades del organismo monetario italiano han mantenido contactos para sondear las posibilidad de que un grupo de compañías y bancos del país pudiera hacer frente a las pretensiones de la entidad española, mientras parte de la clase política defendía el concepto de "italianidad", para oponerse a la influencia extranjera en sus empresas.
En este contexto, y a la espera de dar a conocer la respuesta formal, fuentes del Banco de Italia han apuntado algunos elementos de crítica con la gestión desarrollada en los últimos tiempos por la Banca Nazionale del Lavoro.
Como primer accionista el BBVA tiene una responsabilidad, incrementada en los últimos tiempos con la consecución de un pacto con otros socios relevantes, la aseguradora Generali (8,7%) y el empresario Diego della Valle (4,9%), que controlan los órganos ejecutivos de la entidad romana.
En concreto, el Banco de Italia señala que en 2004 las pérdidas de la BNL han sido de 34 millones de euros, un dato con el que quieren hacer ver que la gestión ha estado caracterizada por las carencias y ha sido en general poco satisfactoria.
Con este tipo de argumentos el Banco emisor parece mostrarse reacio a las intenciones del BBVA de hacer una oferta para hacerse con la BNL.
El gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, se ha caracterizado tradicionalmente por dificultar en lo posible la presencia de entidades extranjeras en firmas italianas.
Esa línea habitual es la que ha llevado a Fazio a promover en los últimos días encuentros con dirigentes de diferentes compañías para sondear la posibilidad de montar un frente común ante las pretensiones del BBVA.
En esta batalla el gobernador ha encontrado el respaldo de algunos accionistas importantes de la BNL ya previamente poco acordes con la gestión del banco español y sus aliados.
Es el caso del empresario de la construcción Francesco Gaetano Caltagirone, que ha montado en torno suyo un "contra-pacto" opuesto al banco español.
Mientras Diego della Valle ha defendido la pretensión del BBVA de hacer una oferta para conseguir la BNL, el otro aliado, la aseguradora Generali, se ha mostrado cauto.
El lanzamiento oficial de la OPA, si es autorizada por el Banco de Italia, dejaría a los socios de ese pacto manos libres para decidir y Generali ha anunciado que cualquier decisión será adoptada tras conocer en qué consiste la oferta.
"Expresaremos nuestra posición sólo cuando se conozcan las condiciones de la oferta, evaluada en función de nuestros intereses y estrategia empresarial, y con respeto a las reglas del mercado", dice la nota de Generali.
El peso de Generali en el accionariado es fundamental en una eventual OPA para hacer que triunfara o, por el contrario, para dificultarla o incluso impedirla si se alineara con los opositores de Caltagirone.
Otros actores de este caso son el banco Monte Paschi di Siena, que con algo más del cuatro por ciento se ha mostrado frío respecto a las pretensiones de unos y otros y, como Generali, espera a ver las condiciones de la eventual oferta.
Desde fuera ha llegado otra aseguradora, Unipol, cuya dirección ha sido contactada por el Banco de Italia para que participe en la operación alternativa a los deseos del BBVA, para lo cual podría comprar la participación de Generali.
En este contexto de contactos y comentarios el BBVA confirmó en la tarde de ayer, jueves, que mantiene el plan inicial respecto al control de la italiana BNL y que no piensa llevar a cabo modificación alguna en las condiciones financieras.
Cuando anunció sus intenciones, el banco español dijo que la adquisición de la BNL se haría a través del canje con acciones de nueva emisión de BBVA (unos seiscientos millones de títulos), a razón de una del banco español por cinco de la entidad financiera italiana. EFE
jgb/txr