Atenas, 8 mar (EFE).- El primer ministro conservador griego, Costas Caramanlis, dijo hoy, al cumplir un año en el poder, que su gobierno tiene como objetivo traer "un cambio político y la refundación del Estado", pero confesó que "la situación económica en el país es difícil".
En una cena anual ofrecida por la Asociación de Prensa Extranjera al jefe de Gobierno, Caramanlis se refirió a la obra de su ejecutivo en los primeros doce meses en el poder.
Según recientes encuestas, la Nueva Democracia, en el Gobierno, lleva una ventaja de 4,1 a 4,8 puntos sobre el de oposición mayoritaria socialista PASOK.
"Tenemos grandes problemas pero también somos un país con muchas oportunidades", dijo Caramanlis, mencionando las modificaciones que ha llevado a cabo para atraer inversiones extranjeras, como la liberación del mercado de energía, la mejora de la administración, el desarrollo del turismo y los primeros pasos para la privatización de industrias estatales.
Dijo que en los años del gobierno socialista Grecia se había transformado en "el imperio del déficit" y que este año ha logrado disminuirlo en 3.000 millones de euros.
Proclamó el año 2005 como el de la "competitividad", en el que se favorecerá a la empresa y se hará un mejor uso de los fondos estructurales de la Unión Europea (UE).
También se confía en que el déficit baje al 3 por ciento del PIB dentro de dos años, aunque el ritmo de desarrollo no se espera que supere el 4 por ciento.
"Nuestra economía no funciona como debería, y el nivel de vida de los griegos es uno de los más bajos de la UE, debemos ser más competitivos, no se ha hecho ninguna inversión extranjera seria en el país en los últimos años", declaró Caramanlis, que se fijó un período de dos años para la recuperación económica.
Se refirió al objetivo del Gobierno de actuar con transparencia y combatir la corrupción, recordando el compromiso de respetar el Estado de Derecho y las leyes.
Sobre la política exterior de Grecia, puntualizó el papel activo que desea jugar en los Balcanes para "contribuir a transformar al polvorín de Europa en una tierra pacífica".
Subrayó la importancia de que una solución para la administración de Kosovo sea conforme a las normas del derecho internacional y las resoluciones de la ONU.
Caramanlis dio una gran importancia al apoyo de la comunidad internacional para que los Balcanes sigan una orientación europea, acentuando que en el caso de Kosovo "queda aún mucho trabajo por hacer".
Sobre las relaciones entre Atenas y Ankara, Caramanlis declaró que "hay una mejora del clima en las relaciones con Turquía", y subrayó que "Grecia asumió una valiente decisión de apoyar la orientación europea de Turquía, pero quedan aún muchos esfuerzos para hacer".
Añadió que "Ankara debe tener una política compatible con la Unión Europea". EFE
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