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Un estudio de la empresa Unimer indica que el dinero que recibirán los trabajadores como aguinaldo este año será utilizado en forma más prudente que en el 2008.
Un 63% de los empleados tienen intenciones de ahorrar el dinero, pagar tarjetas de crédito, el carro o hacer reparaciones en el hogar.
Cerca de 1,4 millones de asalariados se aprestan a recibir el pago del decimotercer mes.
Los datos los revela una encuesta sobre las intenciones de gasto del aguinaldo, realizada vía telefónica por la empresa Unimer entre octubre y noviembre a 800 costarricenses en todo el territorio nacional.
Según los resultados, frente a un período de crisis financiera la mayoría de los costarricenses que trabajan (527 de los 800 entrevistados) tienen intención de ser más cuidadosos en sus gastos, en comparación con el año anterior.
El informe señala que la conducta de gasto para este año se debe, en parte, a que existen más intenciones de ahorro pues un tercio de los entrevistados que esperan recibir aguinaldo las tiene.
El premio por ahorrar. El sistema financiero nacional, en términos generales, ofrece tasas de interés similares a las que se ofrecían a la misma fecha del año anterior.
Quienes se decidan a invertir, por ejemplo, en un depósito a plazo en colones a seis meses recibirán por sus ahorros una tasa promedio del 7,87% en bancos públicos y del 9,49% en privados.
En el 2008 eran del 7,69% y del 10,17%, respectivamente. Las expectativas en los mercados son de tasas crecientes, según dijo Andrés Víquez, analista del puesto de bolsa Aldesa.
Endeudarse con bancos o financieras para sufragar los gastos de fin de año es una opción impensable para casi 9 de cada 10 trabajadores. Endeudarse en tiendas o comercios es igualmente una opción poco atractiva para el 76% de los entrevistados que trabaja. Solo un 16% estaría dispuesto a gestionar un crédito directamente en un almacén o tienda.
La mitad de los encuestados dijeron que no estarían de acuerdo en aumentar el uso de su tarjeta de crédito para gastos de fin de año, lo que, aunado a los 4 de cada 10 que dicen no tener tarjeta o que simplemente no la utilizarán, reafirma la prudencia de los costarricenses.
