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Zapatón, Puriscal. Durante este mes de mayo, la comunidad de Zapatón celebra el vigésimo sexto aniversario de la creación de la reserva indígena y, como parte de la conmemoración, busca impulsar sus raíces culturales.
A partir del 17 de mayo de 1982, un decreto designó a esta comunidad “Reserva Indígena Huetar de Zapatón” y, desde entonces, dejó de llamarse Caserío Indígena de Zapatón de Puriscal.
La reserva de Zapatón cuenta con una población de 340 habitantes y el 95% de ellos son indígenas. Su territorio tiene una extensión de 3.515 hectáreas, pocas de estas en manos de indígenas.
Rescatan costumbres. Cada año, mayo es un período de festividad para los habitantes de Zapatón, debido a que durante ese mes las escuelas y colegios llevan a cabo distintas actividades culturales, en las que el principal objetivo de la comunidad es rescatar y preservar sus tradiciones.
Eduardo Matamoros, director de la escuela de Zapatón, manifestó que las actividades de todo el mes buscan que el pueblo costarricense conozca más acerca de las raíces culturales de los indígenas.
“Es importante aportar el rescate y expansión de prácticas culturales tan valiosas como la transmisión oral de parte de los mayores a las nuevas generaciones, así como las tradiciones y conocimientos relacionados con la identidad cultural de esta comunidad”, aseveró.
Agregó que es importante promover este tipo de actividades para motivar e invitar a los niños y jóvenes a explorar con orgullo sus propias raíces.
Entre las costumbres que aún conservan los habitantes de la reserva huetar se encuentran la pesca, la siembra de frijol, maíz y arroz, y el uso de utensilios de trabajo como el “jucó” y “espeque”, así como de insecticidas naturales para combatir plagas.
Además, dentro de la gastronomía indígena de esta zona se encuentran los picadillos de hojas, tallos, raíces y frutos como la “surtuna” o “suara”, carne seca al estilo huetar y, lo que no puede faltar, la chicha hecha de maíz.
Los vecinos elaboran también artesanías a base de bejuco, tule, estococa, madera y semillas.
Como parte de esta celebración, vecinos y delegaciones de diferentes comunidades han visitado la reserva indígena en un encuentro cultural.
