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Una nueva presentación de un fármaco contra el Alzheimer acaba de entrar al país y podría ayudar a algunas de las 20.000 personas que padecen la enfermedad.
Es el Exelon Patch, un parche creado por el laboratorio suizo Novartis, que libera a través de la piel una dosis de rivastigmina, droga que aumenta la producción de acetilcolina, una sustancia crucial para la comunicación entre las neuronas que, en los pacientes con Alzheimer, tiene niveles muy bajos.
Ese es el mismo principio de las píldoras que la misma empresa farmacéutica introdujo en el país el año pasado y se ha consolidado como opción terapéutica para los pacientes que comienzan a presentar síntomas de la enfermedad y se siguen utilizando hasta que el deterioro neurológico es grave.
Los estudios del laboratorio y los testimonios de médicos y pacientes certifican que esta nueva presentación del tratamiento ha demostrado ser igual de efectiva pero, además, logra reducir los efectos secundarios gastrointestinales que acarrea el medicamento de tipo oral.
“Quienes padecen Alzheimer son personas mayores y sufren con frecuencia otras enfermedades relacionadas o no con esta afección. Deben tomar muchas medicinas diarias y eso hace que su sistema digestivo se resienta: una pastilla menos puede hacer alguna diferencia”, opinó el doctor Allis Sellek, presidente de la fundación de Alzheimer de Costa Rica.
El parche fue aprobado por la FDA ( Agencia de Control de Aalimentos y Drogas de Estados Unidos) en el 2007 y en algunos países europeos es suministrado por las autoridades de sanidad pública.
El medicamento transdérmico se puede pegar sobre la piel de la espalda, el pecho o el antebrazo del paciente y debe dejarse puesto durante 24 horas ya que la droga se libera de forma continua y controlada. Es decir, no hay riesgo de excederse en la dosis.
“Para los cuidadores, es un alivio porque pueden controlar visualmente haber aplicado el parche y tener una preocupación menos”, explicó el médico geriatra Carlos Alpízar.
Recordó que el sufrimiento que genera a los cuidadores y a la familia ver cómo, por el Alzheimer, poco a poco se pierde la persona querida, es largo.
No lo cura. Ninguna terapia puede evitar o curar el Alzheimer, la forma más común de demencia. Es una enfermedad neurodegenerativa más común y se estima padecen 25 millones de personas en el mundo.
Sin embargo, los fármacos han logrado demorar la evolución de la enfermedad “En quienes siguen un tratamiento los síntomas de pérdida de memoria y demencia se retrasan hasta por dos años ”, afirmó Sellek.
Además, de las dos presentaciones del Exelon existen en el país otros dos medicamentos: el Reminyl y el Eranz, pero la Caja Costarricense de Seguro Social no proporciona ninguno.
“El Alzheimer es una enfermedad muy cara no solo por los medicamentos, sino por la atención constante que requieren los pacientes”, indicó Sellek
