La Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de Estados Unidos aprobó la primera vacuna contra el virus del herpes zóster.
El producto, Zostavax, es del laboratorio Merck e ingresará en pocos días a las farmacias estadounidenses.
El virus del herpes zóster provoca una fuerte infección que afecta las terminales nerviosas de la piel.
Esto ocasiona vejigas y dolorosas erupciones.
Hasta ahora, solo existían tratamientos para aliviar los síntomas del herpes zóster, pero nada prevenía su aparición.
La vacuna ofrece un 51% de protección contra la aparición de la enfermedad, y consiste en una sola dosis.
Está aprobada para su uso en personas de 60 o más años que sufrieron de varicela.
El herpes zóster es la reactivación del virus que causa la varicela. Este virus permanece latente desde la infancia y puede reaparecer en la vejez.
Costo. "Este va a ser un fármaco muy importante. Tenemos muchos planes para hacer del producto un gran éxito", dijo a las agencias de noticias Christine Fanelle, vocera de Merck.
En Estados Unidos, el laboratorio cobrará $145 (¢74.000) por la vacuna.
Todavía no hay planes de venderla en Costa Rica. "Vamos a evaluar la posibilidad de traerla pronto al país", manifestó Patricia Salazar, directora médica de Merck.
Nueva aplicación. Los estudios clínicos para demostrar la efectividad y seguridad de la vacuna se realizaron en unos 40.000 hombres y mujeres mayores de 60 años.
La mitad recibió la dosis de Zostavax y el resto, un placebo (droga sin efecto terapéutico).
En los primeros, la droga redujo la incidencia de herpes zóster en un 51,3% en comparación con quienes recibieron el placebo.
Además, la vacuna redujo en un 39% la incidencia de neuralgia posherpética, que es la complicación dolorosa más frecuente del herpes zóster.
También la Agencia Europea del Medicamento está por dar su visto bueno al producto para su venta en esa región del mundo.
En Estados Unidos, Merck planea buscar una segunda aprobación para vender la vacuna a personas entre 50 y 60 años. “Trabajaremos con la FDA para obtener una indicación (de la vacuna) que comience a los 50 años”, aseveró Jeffrey Silber, director de investigación clínica de Merck.