
Nuevas imágenes del cometa interestelar 3I/ATLAS captadas por el Telescopio Espacial Hubble y la misión europea Jupiter Icy Moons Explorer (Juice) ofrecieron datos clave sobre su estructura, comportamiento y composición.
El 30 de noviembre, la cámara Wide Field 3 del Hubble registró al cometa cuando se encontraba a 286 millones de kilómetros de la Tierra. La imagen reveló un núcleo pequeño rodeado por una coma azul intensa, causada por la emisión de gases como cianogeno y amoníaco, liberados por el calor del Sol.
A diferencia de los cometas tradicionales del Sistema Solar, el 3I/ATLAS no posee un manto de polvo. Esto permitió observar su brillo de forma más clara. Además, su forma de gota, ya visible desde julio, confirmó una expulsión asimétrica de polvo, resultado directo del calor solar.
Juice detectó dos caudas distintas
La misión Juice, a una distancia de 66 millones de kilómetros del cometa, logró una imagen con su cámara de navegación. Esta confirmó la existencia de dos caudas activas: una formada por plasma ionizado, alineada con el campo magnético interplanetario, y otra por partículas sólidas.
Este hallazgo demostró que, a pesar de su origen interestelar, el 3I/ATLAS responde a los mismos principios físicos de otros cometas, como la interacción entre el viento solar, el polvo y los gases.
Aunque aún no se han transmitido los datos completos de los cinco instrumentos científicos de Juice, se espera que entre el 18 y el 20 de febrero de 2026 revelen más detalles sobre la química y estructura de la materia que compone al cometa.
Una trayectoria veloz y precisa
Detectado en julio de 2023, el cometa viaja a una velocidad de 246.000 km/h. En octubre de ese mismo año, pasó a 29 millones de kilómetros de Marte, lo que ayudó a refinar sus cálculos orbitales.
Se espera que su máxima aproximación a la Tierra ocurra el 19 de diciembre de 2025, cuando se ubique a 270 millones de kilómetros, sin representar peligro alguno. Luego de ese paso, se alejará mientras atraviesa las constelaciones de Virgo y Leo.
Un laboratorio cósmico en movimiento
El análisis combinado del Hubble y Juice ofrece una oportunidad única para comparar un objeto de otro sistema estelar con los cometas típicos del Sistema Solar.
Los investigadores, al estudiar el brillo, las caudas, la coma y su trayectoria, comenzaron a obtener pistas sobre el tipo de sistema en el que se habría formado el 3I/ATLAS.
Este cometa se convirtió en una especie de laboratorio natural, que permite estudiar un fragmento de otro rincón de la galaxia, mientras cruza fugazmente el campo visual de la humanidad.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.
