
Berlín. EFE. Científicos de la Organización Europea para la Investigación Astronómica en el Hemisferio Austral (ESO) descubrieron fuera de nuestro Sistema Solar un planeta con temperaturas muy similares a las de la Tierra, que podría tener agua en estado líquido y, por tanto, albergar vida.
Este “nuevo” planeta tiene un radio de 1,5 veces la Tierra y una masa cinco veces mayor que esta, informó ayer el equipo de la ESO, formado por astrónomos suizos, franceses y portugueses.
“Creemos que la temperatura de esta ‘súper-Tierra’ oscila entre los 0 y los 40 grados, de forma que el agua podría ser líquida allí”, comentó Stéphane Udry, del Observatorio de Ginebra.
Los expertos explican que el lejano planeta es el más pequeño descubierto fuera del Sistema Solar hasta ahora. Además, se encuentra en la constelación de Libra y gira en torno a una estrella llamada Gliese 581.
El planeta descubierto está 14 veces más cerca de su estrella que la Tierra frente al Sol, explican.
Los expertos recalcan que la estrella Gliese 581 es más pequeña, fría y luminosa que el Sol, por lo que el planeta se encuentra en una zona con temperaturas ambientales “habitables”.
Las predicciones realizadas por los científicos mediante el uso de distintos modelos apuntan a que el planeta debería ser o bien rocoso, como nuestra Tierra, o estar cubierto por océanos, señaló Udry.
Vida extraterrestre. “En vista de su temperatura y su proximidad relativa (Gliese 581 es una de las estrellas cercanas a la Tierra), este planeta será con mucha probabilidad un objetivo muy importante para las futuras misiones espaciales que se dediquen a la búsqueda de vida extraterrestre”, señaló Xavier Delfosse, de la Universidad de Grenoble.
Según Delfosse, “si se realizara un mapa de los tesoros del Universo, uno estaría tentado a marcar este planeta con una ‘x’”.
Gliese 581 es una de las 100 estrellas más próximas a la Tierra, situada a tan solo 20,5 años luz de la constelación Libra y con una tercera parte de la masa del Sol, precisaron los astrónomos.
Estrellas como la Gliese 581 son para los astrónomos los objetivos ideales a la hora de buscar planetas habitables, explica el experto.
Esto ocurre porque al emitir menos luz, se calcula que la zona habitable está mucho más cerca de la estrella que en el caso del potente Sol, recalcó Xavier Bonfils, de la Universidad de Lisboa.