La Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos y la Agencia Europea del Medicamento aprobaron la venta de la primera insulina que se inhala por la boca, según comunicaron ayer sus fabricantes.
Se trata del producto Exubera, desarrollado por los laboratorios Pfizer, Sanofi-Aventis y Nektar Therapeutics, que ayudará a reducir el número de inyecciones de insulina para los diabéticos.
Exubera está aprobado para pacientes mayores de 18 años que recurren a medicamentos orales para eliminar el exceso de azúcar en la sangre, pero no están siendo bien controlados, por lo cual necesitan dosis de insulina.
Además, el fármaco puede ser usado en combinación con dosis inyectadas de insulina en aquellos diabéticos que dependen de esa hormona por completo para regular sus niveles de azúcar.
De esa forma, un diabético que debe recibir dos inyecciones de insulina por día podría pasar a una sola inyección, más una dosis de insulina inhalada.
"El producto no sustituye por completo las inyecciones por insulina, pero sí reduce a la mitad la cantidad de esas dosis, algo realmente revolucionario", explicó José Carlos Espinoza, subdirector médico de Pfizer Costa Rica.
El fármaco entrará a las farmacias estadounidenses y europeas entre julio y agosto. A Costa Rica podría llegar en los primeros cuatro meses del 2007.
"Todavía no tenemos el precio definitivo", dijo Espinoza.
Gran descontrol. En los diabéticos la glucosa (azúcar) alcanza valores anormales en la sangre.
Eso ocurre porque el organismo no produce una hormona llamada insulina o lo hace en cantidades insuficientes para controlar los niveles de glucosa en el organismo.
Por ello muchos diabéticos deben administrarse insulina para controlar la cantidad de glucosa.
Exubera contiene insulina en polvo que se inhala vía oral hacia los pulmones, lo cual ofrece una nueva opción a los diabéticos que necesitan inyecciones.
Debe usarse antes de las comidas con un dispositivo de mano, similar a la bomba para aspirar que ayuda a pacientes asmáticos.
El producto solo está aprobado para pacientes diabéticos mayores de 18 años.
Además, no pueden recibirlo diabéticos fumadores, porque los estudios mostraron que el organismo de esos pacientes absorbe altas cantidades de insulina inhalada por la boca.
Tampoco está indicado para diabéticos que sufren de una enfermedad pulmonar obstructiva crónica, ya que el fármaco produce tos e insuficiencia respiratoria en esos casos.
En todo caso, debe consultarse con el médico antes de comprar la droga.