
En el mundo de las cosas diminutas, ese que es regido por la nanotecnología, ya existen los carros.
Un equipo de científicos de la Universidad de Rice, en Houston, Texas, ha creado el vehículo más pequeño del mundo.
Bautizado por sus creadores como nanocarro , el vehículo está constituido por una sola molécula que contiene el chasis, los ejes y cuatro ruedas.
Las ruedas de este auto molecular son las buckyballs , esferas similares a la estructura de un balón de futbol, compuestas por 60 átomos de carbono.
El nanocarro es imposible de observar a simple vista y mide cuatro nanómetros de largo (un cabello humano mide 80.000 nanómetros de diámetro).
A pesar de su pequeñez, cumple con las características de un carro: se mueve sobre sus cuatro ruedas en una dirección perpendicular a sus ejes.
Auto a prueba. Otros grupos de investigadores han creado moléculas que tienen la forma de un automóvil, pero ninguna de esas moléculas funciona como tal.
Para probar que este nanocarro realmente es un vehículo, los creadores debieron someterlo a un experimento.
Los ingenieros Kevin Kelly y Andrew Osgood observaron, con la ayuda de microscopios de gran precisión, cómo los nanocarros se movían sobre una superficie de oro.
A la temperatura ambiente, las alianzas eléctricas de los átomos en las ruedas del nanocarro hacen que estas se mantengan completamente pegadas a la superficie de oro.
Sin embargo, cuando la temperatura se eleva a los 200 grados centígrados, las alianzas eléctricas se relajan y permiten que las ruedas "caminen".
Imágenes, captadas minuto a minuto, del viaje de los diminutos carros, mostraron que el movimiento se daba por el andar de las ruedas y no porque la molécula se deslizaba sobre la superficie.
El pequeño auto promete ser un aliado en la construcción de la manufactura molecular. Los investigadores de la Universidad de Rice ya trabajan en la creación de un nanotractor capaz de llevar un cargamento molecular.
El equipo que creó el nanocarro, liderado por el químico James M. Tour, invirtió ocho años en el desarrollo del vehículo.
El resultado de su hazaña fue dado a conocer en la revista científica Nano Letters .