
WASHINGTON. AFP Tras un letargo de nueve años de viaje en el espacio profundo, esta semana la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) despertó a la sonda New Horizons (Nuevos Horizontes).
La misión de esa nave es estudiar de cerca al lejano cuerpo por primera vez.
“New Horizons está saludable y cruza silenciosa el espacio profundo, a cerca de 4.827 millones de kilómetros de la Tierra, pero su letargo ha terminado”, dijo Alice Bowman, quien es jefa de operaciones del laboratorio de física aplicada de la Universidad Johns Hopkins, cerca de Washington.
La sonda transmitió un mensaje a la Tierra, desde donde fue lanzada en enero del 2006, tras salir de una hibernación de 1.873 días, cerca de dos tercios de su viaje, para preservar la energía eléctrica de la nave.
Durante su viaje, los ingenieros de la NASA despertaron la sonda cada cierto tiempo para comprobar que sus sistemas aún funcionaban.
La computadora de la nave también ha estado enviando un mensaje semanal a la Tierra, que demoró cuatro horas en llegar.
En enero próximo, a unos 260 millones de kilómetros de distancia de Plutón, New Horizons iniciará su exploración de este cuerpo helado con varias lunas.
Durante su misión de seis meses, New Horizons colectará datos de la topografía de Plutón y su luna más grande, Caronte, proveyendo a los astrónomos una mirada más cercana de sus superficies oscuras difíciles de observar desde la Tierra.
El aparato está equipado con siete instrumentos, incluidos espectómetros infrarrojos y ultravioletas, una cámara telescópica de alta resolución y un detector de polvo espacial.
Luego, en julio, justo antes de concluir el estudio del cuerpo, la sonda pasará lo más cerca de Plutón, que tiene unos 2.300 km de diámetro –más pequeño que la Luna, satélite de la Tierra–.
Entonces, pasará cerca de otros objetos en el cinturón de Kuiper, un vastísimo anillo de escombros sobrantes del nacimiento del sistema solar, que ocurrió hace al menos unos 4.600 millones de años.