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El próximo viernes, el astronauta francés Thomas Pesque se instalará en una nave Soyuz, que se separará de la ISS y emprenderá un viaje de 3 horas 20 minutos hasta llegar a la estepa de Kazajistán. (AFP PHOTO / EUROPEAN SPACE AGENCY / STR)
París
El astronauta francés Thomas Pesquet, que ya hizo las maletas para regresar a la Tierra dentro de tres días, volverá con "una nueva mirada" sobre el planeta azul, "una verdadera joya", aunque "frágil", declaró a la AFP en una entrevista en exclusiva.
Tras pasar un poco menos de 200 días en la Estación Espacial Internacional (ISS), a 400 kilómetros de la Tierra, el astronauta de 39 años dice sentirse preparado para volver a casa, según afirmó este martes desde el módulo europeo de la Estación Espacial Internacional (EEI).
El próximo viernes, se instalará con su colega ruso en una nave Soyuz, que se separará de la EEI y emprenderá un viaje de 3 horas y 20 minutos de duración que los llevará a la estepa de Kazajistán.
Nueva perspectiva
"El espacio me ha cambiado un poco", reconoció Pesquet, quien compartió en las redes sociales numerosas fotos de la Tierra tomadas desde el espacio. Regresa convencido de que "el planeta es una verdadera joya", aunque "frágil".
"El hecho de ver el planeta, de ver su fragilidad con cierta perspectiva, permite apreciarla", aseguró. "No tenemos consciencia de hasta qué punto es delgada la atmósfera (...), de hasta qué punto somos capaces de dañar el planeta", continuó.
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Durante su estancia, Pesquet llevó a cabo muchas experiencias científicas y salió dos veces al espacio en "caminata".
"He hecho más o menos todo lo que quería hacer (...) Los objetivos principales de la misión se han cumplido", afirmó mientras hacía malabarismos con su micrófono, jugando con la ingravidez.
De regreso
El astronauta dice estar contento de regresar a su "vida real", "de volver a ver su casa, su familia y sus amigos de la infancia".
Definió su estancia en el espacio como "un breve paréntesis al margen de la vida normal". "Estoy un poco triste de abandonar este entorno, sobre todo porque no sé si volveré algún día", pero "seis meses es mucho tiempo", dijo.
Allí arriba echó de menos a su pareja, su familia, sus allegados, y también "el hecho de poder pasearse en libertad", de salir a dar una vuelta y poder sentir "el viento, la lluvia".
Horas después de su aterrizaje, Pesquet viajará en avión a la ciudad de Colonia, en Alemania, donde se encuentra el centro europeo de astronautas. Los médicos examinarán allí su estado de salud y su readaptación tras un largo periodo en situación de ingravidez.
Los médicos también proseguirán la parte científica de la misión. "En cuanto regrese, me harán una biopsia del músculo" en la pierna, explicó Pesquet. También le harán análisis de sangre y de orina.