El legendario goleador del Deportivo Saprissa, Evaristo Coronado, analizó el panorama del clásico nacional que se jugará este domingo en el estadio morado y dio su perspectiva sobre el momento de ambos equipos.
Con 148 goles en su historial como saprissista, Coronado sabe bien lo que significa disputar estos encuentros y, aunque ve una ligera ventaja para Alajuelense, dejó claro que en un clásico nada está escrito.
“Veo un clásico un poquito cargado hacia Alajuelense en cuanto a la estabilidad que le dan los buenos resultados y tener un equipo que posee más tiempo de trabajo con el cuerpo técnico, comparado con Saprissa”, afirmó Coronado, subrayando que la continuidad de un proceso puede marcar diferencia en este tipo de encuentros.
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El exdelantero hizo hincapié en que Saprissa ha sufrido constantes variantes en su alineación y en su esquema de juego, lo que dificulta la consolidación de una idea futbolística clara.
“Se debe consolidar la labor de equipo y eso no se logra rápido. No es porque llegó determinado entrenador y a los 15 días el equipo va a estar jugando fluido, sino que requiere meses de trabajo”, explicó.
Coronado destacó la importancia de que los jugadores se conozcan a fondo dentro del campo:
“Uno debe saber que a determinado compañero hay que darle el balón al pie y a otro por delante para que corra. Saber que uno cabecea bien y que otro arriba no la va a pelear. Infinidad de detalles que solo con el día a día y el trabajo de algunos meses se alcanza”.
Aunque el exgoleador saprissista ve a Alajuelense mejor estructurado, tampoco cree que los rojinegros estén en su mejor versión.
“Tampoco están muy sólidos en este momento. Los ratos que he podido ver no los veo tan contundentes como para pasarle por encima a los rivales, manifestó Coronado, quien advirtió que en este rubro, la Liga supera a Saprissa.
“Alajuelense tiene que esforzarse para sacar los resultados, pero ahí van y creo que en ese aspecto van mejor que Saprissa”.
Pese a todo, Coronado recalcó que en estos duelos las diferencias se reducen y lo emocional juega un papel clave.
“En estos partidos, ningún equipo sale pensando que tratarán de que no le metan más de dos o tres goles. En estos juegos, los futbolistas saben que es un clásico, que pueden perder otros encuentros, pero estos no se deben perder”.

El exgoleador también destacó un factor que podría pesar en la cabeza de los jugadores rojinegros: los 14 partidos consecutivos sin victoria de Alajuelense en el Estadio Ricardo Saprissa.
“Todo eso suma, en el inconsciente del jugador queda grabado que eso ha estado ocurriendo durante tantos años y si recibe un gol en cualquier minuto, el inconsciente le recuerda que va a pasar lo mismo”.
Por último, Evaristo recordó que los pronósticos pueden fallar, porque ha vivido clásicos donde el equipo que llegaba como víctima terminaba ganando, y otros donde el favorito caía sorpresivamente.
“Yo fui a jugar muchos clásicos donde, según los pronósticos, éramos la víctima y salimos adelante. En otros, éramos los favoritos y perdimos”.
El domingo, Saprissa y Alajuelense se medirán en un duelo que promete emociones fuertes. La teoría puede inclinar la balanza, pero en un clásico, la historia y la pasión siempre tienen la última palabra.

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