Berlín, 28 abr (EFE).- El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y el canciller alemán, Gerhard Schroeder, iniciaron hoy una nueva etapa en las relaciones bilaterales que se refleja en la voluntad, expresada por ambos, de cooperar en favor de la Constitución europea y de una resolución de la ONU sobre Irak.
Zapatero y Schroeder expresaron esas intenciones en la conferencia de prensa que ofrecieron con motivo de la visita a Berlín del jefe del Gobierno español, quien precisó que quiso que su primer viaje a un país de la UE fuera a Alemania al ser uno de los "motores importantísimos" de la Europa comunitaria.
El objetivo es abrir una nueva etapa en las relaciones entre los dos países y que podrían propiciar, en algún momento, cumbres o iniciativas tripartitas junto con Francia, según dijo el canciller al ser preguntado por esa posibilidad.
Una de esas iniciativas podría ser impulsar una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para la reconstrucción de Irak y la transferencia de soberanía a este país.
Zapatero dijo que hay conversaciones que van a ser intensas con Alemania y Francia, así como con otros socios comunitarios y con EEUU, sobre la "perspectiva de que el Consejo de Seguridad de la ONU pueda adoptar nuevas recomendaciones para la situación en Irak".
Añadió que la dimensión militar no es la única del problema de Irak y que "existe también la dimensión de la cooperación y de la transferencia de soberanía", cuestión a la que cree que se debería referir especialmente la resolución.
Aunque la situación sigue siendo grave en Irak y se mantiene "la lógica militar", según Zapatero, hay otros problemas que resolver, como todo lo relativo a la reconstrucción del país y a la puesta en marcha de sistemas de seguridad propios de los iraquíes.
Tras recordar la retirada de las tropas españolas de Irak, aseguró que su gobierno sigue comprometido con el futuro del país.
Schroeder se mostró dispuesto a "cooperar estrechamente en la formulación" de cualquier resolución al respecto con España, y dijo que el presidente francés, Jacques Chirac (a quien verá mañana Zapatero), también lo está.
Habrá "que preocuparse del momento de la resolución" y de que la misión del enviado especial de la ONU en Irak, Lajda Brahimi, sea un éxito, según Schroeder, quien señaló que "tarde o temprano habrá una resolución".
Respecto a la Constitución europea, ambos expresaron su confianza en que se llegue a un acuerdo en el semestre de presidencia irlandesa, que concluye el 30 de junio, y Zapatero señaló que hoy se está más cerca de un compromiso que hace dos meses.
Por su parte, Schroeder acogió con satisfacción que España acepte el principio de doble mayoría para la toma de decisiones en el Consejo y rehusó dar detalles sobre un posible compromiso por no adelantarse a las propuestas de la presidencia de turno de la UE.
Zapatero agradeció el apoyo de Schroeder desde que fue elegido secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el respaldo de Alemania a España durante la etapa de la transición democrática y durante los últimos años para poner en marcha una Europa con cohesión social.
"Esa Europa ha permitido mucho desarrollo español y a esa cohesión han contribuido decisivamente los gobiernos y el pueblo alemanes", añadió Zapatero, quien agradeció también las muestras de solidaridad recibidas tras los atentados del 11 de marzo.
El jefe del Gobierno español, quien estuvo acompañado por su ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, dijo que, en su primer viaje a la UE, quería estar "en el corazón de Europa".
Schroeder dio la bienvenida a Zapatero, al que calificó de "gran joven amigo" y, tras expresar su orgullo por el hecho de que la primera visita del jefe del Gobierno a un país europeo haya sido Alemania, consideró que su relación va a contribuir a que haya una colaboración "excelente" en cuestiones europeas y bilaterales.
Elogió también el talante europeísta de Zapatero, que, dijo, no impide que defienda los intereses españoles como cree demostrado en las recientes negociaciones sobre el capítulo agrícola en la UE.
Por su parte, Zapatero, al ser preguntado por la posibilidad de que mantenga posturas tan radicales como las de su predecesor, José María Aznar, pero con formas más amables, aseguró que ha habido cambios en el contenido, en la perspectiva y en la concepción de lo que representa la UE "y ustedes -dijo- lo van a poder ir juzgando fácilmente a partir de este momento".
Tras la conferencia de prensa, los dos dirigentes socialdemócratas compartieron una cena en la Cancillería tras la que Zapatero regresará a Madrid. EFE
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