Manila (AP). El número de personas en Asia infectadas con el virus VIH causante del sida podría más que duplicarse y llegar a los 20 millones en cinco años de no existir una mejor respuesta gubernamental y mayor financiación para combatir el mal, advirtieron el viernes las autoridades.
Con el actual nivel de respuesta inadecuada, este número aumentará a unos 20 millones en los próximos cinco años, dijo la independiente Comisión sobre el Sida en Asia, financiada por el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el Sida/VIH en Asia (UNAIDS).
Hay en la actualidad unos 8,6 millones de personas infectadas en Asia con el VIH.
Agregó que el número de muertos a causa del mal es ahora de unos 500.000 anuales y las pérdidas financieras en Asia fueron estimadas en 10.000 millones de dólares anuales. Pero ese coste económico aumentará a 29.000 millones de dólares por año si la epidemia no es controlada en los próximos cinco años.
Pese a los pronósticos, las inversiones en la región para controlar el virus VIH siguen siendo extremadamente bajas, el 10% de los 5.000 millones de dólares requeridos anualmente, agregó UNAIDS.
Según la UNAIDS, el número de personas infectadas que reciben terapia antirretroviral, que inhibe la duplicación del virus VIH, se triplicó con creces desde el 2003, pero representa solamente el 16% del total que necesita tratamiento en Asia.
Solamente Tailandia suministra tratamiento por lo menos al 50% de los que lo necesitan, dijo UNAIDS.
La comisión de nueve miembros, integrada por economistas, legisladores y miembros de la sociedad civil fue creada en el 2006 para analizar el impacto socio-económico del VIH/sida y recomendar medios para mitigarla. La comisión concluye el viernes en Manila un seminario de dos días.
Chakravarthy Rangarajan, presidente del consejo económico del primer ministro indio Manmohan Singh y presidente de la comisión, dijo a los periodistas que aunque la incidencia del VIH/sida es baja en el sudeste de Asia, la región cuenta con una nutrida población, lo que posibilita las infecciones. Tiene además un gran número de trabajadores itinerantes, con potencial de propagar el VIH.