Dumont, que actuó en unas 80 películas desde 1964, incluyendo coproducciones hispano-argentinas y en decenas de obras teatrales, permaneció más de un mes internado en el sanatorio privado Dupuytren, y su muerte causó conmoción en la comunidad artística.
Participó en películas argentinas como La parte del león (1978), Tiempos de revancha (1981) y Últimos días de la víctima (1982) del director Adolfo Aristarain; y en coproducciones hispano-argentinas, entre ellas Conversaciones con mamá (2004), de Santiago Oves.
Por su papel protagónico en Los enemigos (1983), obtuvo el galardón de mejor actor en el Festival de Cine de San Sebastián y en el de Cine Latinoamericano de La Habana.