Bruselas, 17 jun (EFE).- El presidente de turno del Consejo Europeo, el luxemburgués Jean-Claude Juncker, afirmó hoy que, a pesar de la incertidumbre sobre la Constitución de la UE, se respetarán los compromisos para la adhesión de Rumanía y Bulgaria, prevista para 2007.
En una rueda de prensa tras la primera sesión del Consejo Europeo, reunido en Bruselas, Juncker afirmó que "no es cuestión de poner en duda" la adhesión prevista de estos dos países por los problemas que se están produciendo en el proceso de ratificación de la Constitución de la UE.
"Los tratados (de adhesión) se han firmado y serán respetados en su integridad", precisó Juncker a preguntas de los periodistas.
Preguntado asimismo por el proceso de adhesión de Turquía, explicó que no se había discutido el tema en detalle pero que "la mayoría de nuestros colegas han expresado la opinión de que los compromisos que la UE ha adoptado en el último periodo, por supuesto, deben ser plenamente tenidos en cuenta y tienen que ser respetados".
Los planes de ampliación de la Unión Europea a nuevos países, especialmente a Turquía, ha pesado en parte del electorado holandés y francés que votó "no" a la Constitución europea en los referendos celebrados en esos países.
La UE ha recibido a diez nuevos socios, ocho de ellos del Este de Europa, el 1 de mayo de 2004.
Rumanía y Bulgaria firmaron el pasado 25 de abril en Luxemburgo sus tratados de adhesión a la Unión Europea y está previsto que se integren en la UE el 1 de enero de 2007.
Sin embargo, los 25 tienen la posibilidad de retrasar esta entrada un año, hasta el 1 de enero de 2008, si hay retrasos en la preparación de Sofía o Bucarest.
Bulgaria aún debe introducir reformas en su sistema judicial, intensificar la lucha contra el crimen organizado y mejorar la integración de la minoría gitana en los próximos 20 meses.
En cuanto a Rumanía, deberá reformar la Justicia, lidiar con la rémora de una inmensa industria estatal herencia de su pasado comunista, combatir la corrupción y adoptar pasos para controlar el tráfico ilegal en sus extensos límites fronterizos externos.
Turquía debe ahora ratificar y firmar el protocolo de Ankara, que amplía su acuerdo aduanero de 1963 con la UE a los 10 nuevos países miembros, incluyendo a Chipre, con el que no mantiene relaciones diplomáticas, condición para poder iniciar las negociaciones para su adhesión el próximo 3 de octubre. EFE
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