Menuda sorpresa fue la que se llevó René Farraitt, integrante de la agrupación musical El Reencuentro, durante su visita al país, la semana pasada.
Vino a ofrecer un concierto y se encontró con una jovencita rubia, de 13 años de edad e idéntica a él, fruto de una relación que sostuvo con una tica durante una de sus visitas al país, cuando perteneció al grupo Menudo.
Fue esa razón la que llevó a René a ser el gran ausente de la noche en el espectáculo que el 15 de setiembre ofreció El Reencuentro en el Gimnasio Nacional, debido que el nerviosismo y la emoción lo dominaron. No era para menos: saber de una hija que había quedado en las sombras del pasado.
La angustia del cantante se hizo evidente prácticamente desde el ingreso del grupo a la tarima. Mientras los demás sonreían alborozados y agitaban los brazos hacia el público, René exhibía una expresión sombría y mucha cautela en sus movimientos. De un momento a otro, durante la tercera canción, simplemente dio media vuelta y se retiró, para sorpresa de los demás, quienes continuaron el show sin mayores contratiempos.
Y es que de repente cobró fuerza en su memoria aquel capítulo vivido en suelo costarricense hace años.
Una historia que narra doña Ana Arias Alfaro, la abuelita de Adriana González Arias, esa jovencita que encontró a su conocido papá.
Hija de famoso
"Resulta que hace casi 14 años, cuando se realizó una de las primeras Teletones y vinieron cantidad de artistas, mi hija Karen fue a celebrar su cumpleaños entre las estrellas. Ella tenía 17 años y Menudo era lo máximo. Karen había aceptado la invitación de Karla, su mejor amiga, quien tenía acceso a los cantantes internacionales. Fue cuando conoció a René, se gustaron y pasó lo que pasó", dice la señora.
Cuenta doña Ana que ella se enteró de que su hija estaba embarazada por una amiga de la joven.
"Yo le pregunté de quién era la criatura que esperaba, porque ella no tenía novio. Fue cuando me contó que era del cantante que había conocido meses atrás. Como René le había dejado el número telefónico de su casa y además la dirección, lo llamamos, pero no pudimos encontrarlo porque siempre andaba de viaje y su madre no me creía. Entendí que no me creyera", explica la abuela.
Cuando Karen dio a luz, doña Ana quiso llamar a René, pero nunca lo encontraron y aunque hicieron contacto con el entonces mánager del grupo, tampoco obtuvieron respuesta.
"Además, mi esposo se oponía a que lo llamáramos, porque decía que él era famoso y nos podía quitar a la niña. Por eso perdimos el contacto, aunque ahora nos enteramos de que René supo de la existencia de Adriana, pero como era un adolescente no le prestó atención a la situación", agrega la abuela.
Así pasaron los años y Adriana se crió sin una figura paterna más que la de su abuelo.
No fue hasta hace algunas semanas, cuando empezó a circular la publicidad sobre el concierto que el grupo ofrecería en el país, cuando doña Ana pensó que era la oportunidad para reunir a su nieta con su padre.
El encuentro, no reencuentro
Al llegar al país, René, quien había sido informado sobre la existencia de la muchacha por uno de los empresarios involucrados en la organización del concierto, pidió que la joven estuviera en el hotel a su llegada. Fue así como se produjo el encuentro.
"Él me mandó a llamar a la habitación. Allí estaba con Johnny y Ray. Cuando me vio, se le pusieron los ojos llorosos. Me abrazó y me preguntó por mi mamá. En eso bajó a la conferencia de prensa y luego nos volvimos a reunir. Habló por teléfono con mi mamá y no paraba de llorar. Los demás miembros del grupo se sorprendieron del parecido que tenemos", comentó Adriana, quien cursa el primer año de colegio.
Al día siguiente, el de la presentación del grupo, René envió un carro para buscar a la jovencita, con quien permaneció parte del día. Adriana le llevó fotos de cuando ella estaba pequeña y una carta que le había escrito sobre lo que él significa para ella y la falta que le ha hecho. Eso batió las emociones del cantante quien no aguantó en el escenario.
La semana pasada y cumpliendo hasta el momento la promesa de mantenerse en contacto y velar por su hija, René la llamó desde Guatemala.
Vidas separadas
Adriana ha vivido siempre con su abuelita. Su madre se casó y vivió por varios años en Canadá. Dice que desde siempre ha sabido y ha creído que el famoso cantante es su padre, pero que en ocasiones se ha sentido confundida. Por ejemplo, cuando pasan entrevistas en televisión y René dice tener solo dos hijas. Se trata de Naomi de 11 años de edad y Alana, de 5, del matrimonio que tuvo hasta hace tres años y medio, porque actualmente está divorciado.
Por muchos años, el abuelo de Adriana fue quien se encargó de ella y actualmente lo hace un tío que vive en Los Ángeles.
No obstante, Adriana asegura que René, a quien ella llama "papi", quiere hacerse cargo de ella, ayudarla monetariamente, e incluso le dijo que cuando llegue a su casa en Miami, empezará a hacer los trámites para reconocerla legalmente como su hija.
"En diciembre voy para Puerto Rico a pasar con la familia de mi papá. Ahora que estuvo acá hablé por teléfono con su abuelita. Ella casi no podía hablar, me saludó y me confesó que estaba muy nerviosa", dijo la joven.
La abuela de Adriana, doña Ana, asegura que la noticia no trascendió antes, porque como nunca antes encontraron al cantante, no tenían cómo demostrar la situación.
Aunque no pudimos hablar con René, Karen, la madre de la niña se limitó a decir que todo es verdad. Varios personeros del hotel Herradura, en donde se hospedó el cantante, confirmaron la noticia y aseguraron que René no negó en ningún momento el encuentro con su hija. Dijeron que se comportó como un verdadero padre.