Siria es escenario desde el 15 de marzo de un movimiento de protesta contra el régimen, sobre todo en el sur del país, que se ha saldado con más de un centenar de muertos, según activistas de los derechos humanos.
“Siria estudiará la anulación de la ley sobre el estado de emergencia” decretada en el país cuando el partido Baas llegó al poder en 1963, afirmó la consejera presidencial.
Añadió que se "establecerán nuevos mecanismos para luchar contra la corrupción".
Las reivindicaciones de los habitantes de Deraa, la ciudad con más manifestaciones contra el régimen, son “legítimas”, sentenció.
“Las reivindicaciones son importantes y legítimas. Se encuentran en la oficina del presidente Bashar al Asad y de dirigentes sirios”, dijo.
Por su parte, el presidente sirio, Bashar al Asad, promulgó un decreto que estipula “un aumento de los salarios” inmediato de entre el 20 y el 30% para los funcionarios, según anunció la agencia oficial Sana.
Además, la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, reclamó hoy la “liberación inmediata” de los manifestantes encarcelados en Siria, así como el fin del estado de emergencia vigente desde 1963.
“Llamo a la liberación inmediata de todas las personas arrestadas durante las manifestaciones" en la ciudad de Deraa (Siria), declaró Ashton en un comunicado, deplorando “el recurso a municiones reales y a la fuerza excesiva contra los manifestantes pacíficos”.
La jefa de la diplomacia exhortó además “al fin del estado de emergencia y la liberación de todos los prisioneros políticos y defensores de derechos humanos”.