Las acusaciones de cohecho contra el sello discográfico Fonovisa, la casa más importante de música hispana independiente en EE. UU., se han cobrado su primera víctima, al aceptar uno de sus ejecutivos los cargos de soborno a diferentes emisoras de radio.
Jesús Gilberto Moreno, jefe de promoción de Fonovisa, se ha declarado culpable de hacer pagos en metálico a disc jockey de emisoras de radio hispanas, a cambio de que promocionaran sus autores en sus programas.
Según informó el jueves la prensa local, cargos fiscales relacionados con el posible cohecho han recaído sobre el presidente de Fonovisa, Guillermo Santiso, y sobre el sello discográfico, propiedad del grupo mexicano Televisa.
Por el momento, las autoridades no han determinado si se presentarán cargos contra los programadores que han recibido el dinero.
La investigación policial salió a la luz hace un año, cuando el periódico Los Angeles Times analizó el fenómeno del aumento de la música hispana en Estados Unidos y su posible vinculación a este tipo de pagos en 1997.
Sucede que la legislación vigente prohíbe a las emisoras de radio aceptar dinero a cambio de emitir un tema musical, a menos que haga saber este hecho a sus oyentes.
La pesquisas se iniciaron hace dos años con la total colaboración del sello discográfico, lo que ha evitado una mayor gravedad en los cargos.
Durante el proceso, las autoridades pudieron descubrir que el departamento de promoción, supuestamente, hizo sus pagos utilizando mensajeros que entregaban el dinero a los directores de programación de las radios a cambio de emitir los temas de Fonovisa, pagos que en algunos casos llegaron a los $2.000 por persona.
Según parece, el momento en el que estos pagos fueron más frecuentes coincidió con el dominio de Fonovisa en las ondas, situada durante 30 semanas consecutivas a la cabeza de todas las emisoras hispanas en 1997, gracias a las canciones de Enrique Iglesias, Marco Antonio Solís u otros cantantes de su sello.