Buenos Aires, 27 jun (EFE).- El cuerpo de un hombre secuestrado en 1990 y hallado muerto cinco años más tarde aún espera sepultura debido a una demora en la justicia argentina, según informó hoy "La Nación".
Los restos de Andrés Nuñez permanecen en una bolsa dentro de la caja fuerte de un juzgado y, después de 14 años, sus familiares aún no han pedido inhumarlo pese a sus reiterados pedidos.
"Pedí varias veces los restos para darle sepultura, pero me respondieron que hasta que no realice el juicio podrían ser necesitados para la investigación", explicó Mirna Gómez, ex pareja de Nuñez, con quien tuvo una hija.
Andrés Nuñez fue secuestrado el 28 de septiembre de 1990 por personal de la Brigada de Investigaciones de la ciudad de La Plata, la capital de Buenos Aires, y cinco años después su cuerpo apareció incinerado en un campo que era propiedad de uno de los policías acusados por su desaparición.
Según fuentes del juzgado de transición número uno de Horacio Nardo, "hoy no existe un impedimento concreto para entregar el cuerpo".
Mirna Gómez visitó durante años una vez por mes el juzgado para honrar la memoria, frente a la caja fuerte, de quien había sido su pareja.
Pese a la presentación de varios solicitudes formales para que le restituyeran los restos de su pareja, que perdió la vida a los 32 años, nunca lo logró.
Mirna Gómez le escribió una carta a principios de este año al presidente argentino, Néstor Kirchner, para pedirle que la ayude a terminar con este calvario, del que en septiembre próximo se cumplirán 14 años. EFE
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