El estadounidense Farrell Goodman, exmarido de la cantante mexicana Alejandra Guzmán, regresó a América luego de su reclusión penal en Alemania por el delito de tráfico de estupefacientes.
Sin pérdida de tiempo se comunicó con una empresa editorial mexicana para venderle la historia de su relación con la rockera, hija de la también artista y productora Silvia Pinal y el cantante Enrique Guzmán.
Goodman abandonó la cárcel de Dsseldorf-Gerresheim luego de haber estado en prisión preventiva los nueve meses de la sentencia que le dictó la autoridad local.
La baja sentencia que recibió, se debió principalmente a la historia que contó luego de aceptar su culpa. Dijo haber delinquido solo porque estaba cansado de que su esposa lo mantuviera, ya que se encontraba sin
trabajo. Habló también del "maltrato" que recibió durante su infancia y de la "mala suerte" cada vez que intentaba algún negocio.
Luego del arresto de Farrell en Alemania, Alejandra se apresuró a demandar la anulación de su matrimonio. Argumentó que había sido engañada, e incluso negó prestarle ayuda mientras estuvo preso.
Dinero fácil
A raíz de su liberación, Harvy Goddman, el padre de Farrell, alertó en una entrevista con la prensa sobre la posibilidad de que su hijo tratara de vender la historia, pero dijo, "no garantizo que lo que cuente sea verdad".
Ahora Farrell está de nuevo establecido en Miami y sin pérdida de tiempo se puso en contacto con una importante casa editorial de México para ofrecer en exclusiva la historia de su matrimonio con Alejandra Guzmán, porque quizá -como dijo su padre- está necesitado de dinero y tratará de hacer algo para obtenerlo como siempre lo ha hecho, sin trabajar”.